La historia de la Compañía Nacional de Teatro (CNT) envolvió al Palacio de Bellas Artes. Actores y actrices del elenco estable tomaron diferentes partes del recinto para interpretar episodios importantes de personajes sobresalientes que lucharon por apoyar al teatro mexicano a lo largo de la historia.
Así, con esta dinámica titulada Instalación de la memoria, en la cual se exhibieron 17 piezas de teatro inmersivo, iniciaba la celebración de los 50 años de la CNT que reunía a toda la comunidad teatral del país.
Al terminar de recorrer estos 17 fragmentos, el público llegaba a la Sala Principal del recinto de mármol para ser testigo de la entrega de reconocimientos y de 14 breves escenas de montajes emblemáticos de la agrupación.
La noche comenzó con un número musical de la obra El círculo de cal, de Bertolt Brecht, estrenada en 2012, bajo la dirección Luis de Tavira, para después apreciar El Diccionario, Examen de maridos, Super héroes de la Aldea Global, Cuarteto, El galán de ultramar, El alcalde de Zalamea, Fedra y otras griegas, De la calle, Zoot Suit, Las visiones, Tiempo de ladrones, Creator Principium y ¡Violencia!, hasta finalizar con otro número de El círculo de cal.
Héctor Azar, Mercedes Pascual, José Solé, Luis Gimeno, fundadores de la CNT, fueron reconocidos y ovacionados. Sus hijos recibieron los reconocimientos. También fueron homenajeados, entre otros, Luisa Josefina Hernández, Marta Luna, Sabina Berman, Mireille Bartilotti y el maestro Luis de Tavira, por hacer posible la refundación de la CNT y la consolidación del elenco y residencias artísticas estables en la Compañía.
Aurora Cano, directora artística de la Compañía Nacional de Teatro, destacó que la primera función del Palacio de Bellas Artes fue de teatro, lo cual es muy significativo y ahí la importancia de querer celebrar este aniversario en el recinto, “porque este palacio nos contiene a todos, a todas las disciplinas y a todos los artistas”.
“Nunca como en los últimos tiempos pandémicos nos hemos cuestionado tanto el sentido del arte y nunca se ha confirmado su relevancia con tanta fuerza, creo que si algo ha quedado claro después de tanta penumbra mundial es que la imaginación y la belleza son lo único que nos mantienen de pie cuando la oscuridad y la muerte rodean las calles”
Cano explicó que los seres humanos siempre han escapado de la realidad y aunque no se sabe bien por qué, lo hacen, lo que queda claro que la capacidad de imaginar es el centro mismo de la naturaleza humana.
Lo anterior sirvió para destacar una gran cualidad del teatro, ya que en este no solo se imagina, sino que se hace de manera colectiva, es decir, se imagina en compañía y eso es una gran virtud.
La segunda, dijo, es que además de la imaginación y del disfrute estético que implica la experiencia artística en sí misma, el teatro es también el centro de todas las ideas, porque en él se convierten en debates públicos y en reflexiones abiertas, es decir, “el teatro es el arte comunitario por definición”.
Por su parte, Alejandra Frausto, secretaria de Cultura federal, mostró su alegría y felicitó a Aurora Cano por ser la primera mujer en dirigir la Compañía Nacional de Teatro y afirmó que la Compañía tiene una larga historia, pero sobre todo un futuro muy promisorio.
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