Remakes de cine de terror, ¿Éxito o fracaso?
Un remake puede ser una buena forma de explorar, con una nueva mirada, las películas, pero también puede ocasionar una mala experiencia. Repasamos algunas de las cintas de cine de terror que han pasado por este proceso como pretexto a la nueva adaptación de Dulces sueños, mamá
Karina CoronaYa sea por el deseo de mejorar, perfeccionar o renovar las historias, desde los inicios del cine han existido los remakes, muchas veces pueden ser caprichos del director, por un discurso artístico o por motivos económicos y hasta tecnológicos, que las cintas cobran nueva vida a través de otros ojos.
El cine de terror no es la excepción, recientemente se anunció el remake de la cinta austriaca Dulces sueños, mamá (Ich seh, Ich seh), de las directoras Veronika Franz y Severin Fiala, la cual, en 2014, estremeció al público por su historia inmersa en el suspenso e intriga; además, cosechó numerosas críticas positivas y nominaciones al Oscar por Mejor Fotografía y Mejor Película extranjera.
En esta nueva versión hollywoodense, la actriz Naomi Watts, además de protagonizar la película, también será la productora ejecutiva del proyecto, el cual será dirigido por Matt Sobel, basado en el guión de Kyle Warren.
“Lo que se pierde con los remake es que las obras originales se conciben culturalmente en otro país y muchas de estas películas son consideradas de culto o de arte, en cuestión de que no tienen la distribución mediática que tienen estas películas de Hollywood, fue el caso de Jorge Michel Grau con Somos lo que hay, o a la sueca Let me in que tuvo su remake americano y no fue tan bien recibida”, detalla Alejandro Montes Santamaría, director del Festival de Cine de Horror Aurora y Maestro en Estudios Interdisciplinarios.
Naomi Watts se ha convertido en una actriz muy vinculada al cine de género, desde el remake de The Ring, en 2002, bajo la dirección de Gore Verbinski, basada en la original Ringu (Hideo Nakata. Japón. 1998), hasta Mulholland Drive , del cineasta David Lynch y, de acuerdo con Alejandro, actualmente es considerada una especie de Sigourney Weaver que, aunque las vean en otros papeles, los fans del cine de terror las identifican por sus cintas de culto.
Para Santamaría, la parte buena de los remakes es que siempre se habla de la película original y se convierte en un buen pretexto para volver a ver estas películas, revisitarlas y, quizá, mirarla con nuevos ojos y crítica.
“Sí creo que pensar en plataformas digitales también impacta a nivel producción, lo que se hace especialmente para cualquier video bajo demanda como Amazon, como el caso de este remake, sus niveles de producción son tal vez inferiores, quizá por el tipo de cámara, sin conocer los presupuestos, creo producir para este medio es más económico”, comenta.
Algo que también considera Alejandro, es que al hacer otra aproximación a la historia con los remakes americanos se sacrifican muchas estructuras visuales en pro de tener una taquilla más jugosa.
“Cuando salió Goodnight, mommy fue un parteaguas para el cine de terror, porque hubo muchas producciones de esa naturaleza, películas que rayaban entre el cine de arte, con una manufactura no tan hollywoodense, como la película It follows (2014) y, empezó a haber películas de esa línea, ahora tenemos, por ejemplo, a Ari Aster con Hereditary que la puedes ver en la Cineteca y en las salas de cine comercial sin bronca” agrega.
Buenas noches, mamá fue señalada en su momento por presentar a una madre que rechazaba a sus hijos, ahora se podrá observar a través de temas como la violencia hacia las mujeres y feminicidios.
“Está bien volver a verlas y cuestionarlas, aunque tampoco se debería señalar las producciones ni dejar de verlas o condenarlas. La violencia hacia el género y los feminicidios siempre han existido y ahorita podemos ver esta historia desde esa perspectiva, no porque no lo habíamos podido hacer antes, sólo no se nos ocurrió como sociedad verlas desde esa trinchera”, relata.