Estos movimientos critican el sistema patriarcal y rechazan normas tradicionales sobre matrimonio, maternidad y relaciones heterosexuales. Foto: Pexels

Sin matrimonio, sin maternidad y sin hombres: ¿Qué son los movimientos 3B, 4B, 5B y 6B?

Los movimientos 3B, 4B, 5B y 6B son respuestas radicales a las desigualdades de género que han comenzado a ganar presencia en algunas regiones

En los últimos años han surgido movimientos feministas radicales que rechazan las normas tradicionales sobre el matrimonio, la maternidad y el rol de las mujeres en la sociedad. Entre estos destacan los movimientos 3B, 4B, 5B y 6B, que critican profundamente las estructuras patriarcales que históricamente han limitado la libertad de las mujeres.

¿Qué significa el movimiento 4B?

El movimiento 4B, originado en Corea del Sur en 2019 como respuesta a la violencia de género y la desigualdad social, se centra en el rechazo de cuatro aspectos clave: Boda (matrimonio), Bebé (maternidad), Banca (poder económico) y Boys (relaciones con hombres).

Este movimiento promueve una postura radical de resistencia ante el sistema, que se traduce en un rechazo al matrimonio, la maternidad y las relaciones heterosexuales.

Aunque surgido en Corea del Sur, el 4B ha comenzado a ganar tracción en otros países, incluyendo Estados Unidos, donde algunas mujeres lo han adoptado como respuesta al retroceso en derechos reproductivos y la elección de Donald Trump como presidente.

Si bien el 4B es el más conocido, no es el único que adopta esta filosofía de rechazo a las normas tradicionales. Los movimientos 3B, 5B y 6B son variantes que presentan diferencias según los contextos culturales y sociales en los que se desarrollan.

El 4B nació en Corea del Sur en 2019, rechazando matrimonio, maternidad, dependencia económica y relaciones heterosexuales. Foto: Pexels

Movimiento 3B

3B: este movimiento, considerado una versión más simplificada del 4B, rechaza tres áreas tradicionales que las mujeres “deberían” cumplir: Boda, Bebé y Boys (hombres). Aunque similar al 4B, el 3B se enfoca en la autonomía de la mujer sin un rechazo total del sistema.

Movimiento 5B

5B: en el 5B, la crítica va más allá del matrimonio y la maternidad, abarcando también las instituciones financieras, las expectativas laborales y la violencia estructural. El 5B promueve una desconexión radical de las estructuras patriarcales no sólo en relaciones personales, sino en el ámbito público y privado.

Movimiento 6B

6B: el 6B lleva el concepto aún más lejos, proponiendo el rechazo de todas las formas de opresión y control social. Con un enfoque global, el 6B busca deconstruir la identidad de género, el trabajo, el consumo y las expectativas tradicionales, defendiendo la abolición de normas que, según sus defensoras, limitan la libertad personal y colectiva de las mujeres.

Los movimientos 3B, 4B, 5B y 6B representan reacciones radicales contra las desigualdades de género. Foto: Pexels

Los movimientos 4B podrían ganar presencia en el mundo

Estos movimientos reflejan la creciente desconexión entre las expectativas tradicionales de género y las demandas de las nuevas generaciones, que buscan redefinir su rol en la sociedad y desafiar las estructuras de poder opresivas.

Aunque estos movimientos están en expansión, su impacto dependerá de su capacidad para construir alianzas y movilizar apoyo social. En México, su presencia aún es limitada, pero podrían ganar popularidad en los próximos años debido a la persistencia del machismo en el país.

Estos movimientos reflejan una nueva ola feminista, que busca mayor autonomía y propone alternativas radicales a la opresión patriarcal. Foto: Pexels
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