Durante los últimos meses ha aumentado el interés por los chocohongos. Tanto es así, que incluso fueron inspiración de un episodio de La Rosa de Guadalupe, donde cobran la vida de una jovencita.
El propio gobernador de Puebla, Miguel Barbosa Huerta, hizo referencia a los chocohongos en el contexto de casos de intoxicación por consumo de bebidas alcohólicas adulteradas. También mencionó otros riesgos a los que jóvenes y personas menores de edad están expuestas actualmente.
¿Qué son los chocohongos?
Se trata de una droga alucinógena que se encuentra fácilmente para su compra en redes sociales e incluso algunos sitios web. Cabe destacar que se trata de un producto ilegal y cuyo consumo podría poner en riesgo la salud.
El producto se prepara de manera casera utilizando polvo de hongos alucinógenos mezclado con chocolate. Una vez finalizados, los chocohongos se venden por un precio que va desde 450 hasta mil 200 pesos por órdenes de dos a seis piezas, en promedio.
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Según información de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), en el mundo existen unas 250 especies de hongos del género Psilocybe. 53 de ellas crecen en México.
El componente activo de los chocohongos es la psilocibina, sustancia que no está regulada en México. Sin embargo, en otros países se utiliza en el tratamiento contra la depresión y ansiedad.
La psilocibina y psilocina son sustancias psicoactivas que caracterizan a los hongos Psilocibos. Su consumo produce los siguientes efectos:
- Percepción alterada del espacio
- Alucinaciones
- Agorafobia (miedo a los lugares y las situaciones que pueden ocasionar pánico, impotencia o vergüenza)
Como toda sustancia psicoactiva, su consumo desinformado puede provocar una sobredosis con efectos perjudiciales para la salud. Además de alucinaciones, la persona que consume también puede experimentar miedo, pánico, ansiedad y/o paranoia.
Entre otros efectos secundarios para la salud destaca una sensación de debilidad muscular, presión arterial baja, dolores abdominales, vómito y diarrea.
Asimismo, no se trata de una sustancia mortal. Según la UNAM, “los casos reportados por intoxicaciones y muertes por consumo de hongos alucinógenos han sido excepcionales”.