Un caso está dando de qué hablar entre la comunidad médica ya que una mujer tomó ibuprofeno para calmar sus cólicos menstruales, pero terminó en el hospital y con un coma inducido durante 17 días.
Foto: jaque_gmack
Previamente, la mujer indicó que sus cólicos menstruales eran tan fuertes que decidió tomar ibuprofeno; sin embargo, sintió como si se le estuviera pelando la piel tras tomar el medicamento.
De hecho, luego de tomar las pastillas, en tan sólo 48 años, la mujer de 31 años sufrió un ligero picor en el ojo y le surgieron ampollas en la boca.
Foto: jaque_gmack
Tras esto, acudió al hospital y sus síntomas empeoraron rápidamente, ya que las ampollas también le salieron en el rostro lo que le impidió ver correctamente.
En el hospital, los médicos diagnosticaron que la mujer, de nombre Jaqueline Gmack y originaria de Papanduva, Brasil, había desarrollado el síndrome de Stevens-Johnsons (SJS).
Por esa razón es que los especialistas decidieron colocar a Jaqueline en un coma inducido en el que estuvo durante 17 días.
Foto: jaque_gmack
El síndrome de Stevens-Johnsons (SJS) es una rara afección cutánea que provoca que el sistema inmunológico reaccione exageradamente a un fármaco y así ataque la piel, las mucosas y los ojos.
“Fue como si me hubieran quemado de adentro hacia afuera. No sabía lo que me había pasado. Noté que tenía todo el cuerpo vendado, mi visión estaba completamente borrosa y tenía un tubo en la garganta, pero no sentía ningún dolor. Sólo entonces me di cuenta de que estaba muy débil y que me había pasado algo muy grave”, comentó la mujer.
Luego comentó que todas las vendas se las habían puesto debido a que se le había quemado casi toda la piel, sin mencionar que casi perdió todo su ojo.
“Me dijeron que había sobrevivido de milagro, después de salir del coma. Mi familia no me dejó verme en el espejo durante unos días. Cuando finalmente me miré en el espejo, vi a alguien que no reconocí”, comentó para terminar.
