El verano está por llegar y, con él, llegan los virus que aprovechan el calor para propagarse. Uno de ellos es el virus de Coxsackie, un virus altamente contagioso que puede causar diversos problemas de salud, especialmente en niños pequeños.
Este patógeno pertenece a la familia de los enterovirus, un grupo de virus que suelen afectar el sistema digestivo y respiratorio. Existen dos tipos principales de virus de Coxsackie:
- El virus Coxsackie A16 es generalmente la causa más común de la HFMD en los Estados Unidos. Otros virus Coxsackie también pueden causar la enfermedad.
- El virus Coxsackie A6 también puede causar la HFMD, y los síntomas podrían ser más graves.
- El enterovirus 71 (EV-A71) ha sido asociado a casos y brotes en el este y el sureste de Asia. Aunque es raro, este ha sido asociado a enfermedades más graves, como la encefalitis (inflamación del cerebro).
¿Cómo se contagia el virus de Coxsackie?
Según información de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos, las personas con HFMD generalmente son más contagiosas durante la primera semana en la que están enfermas.
Sin embargo, a veces las personas pueden transmitir el virus a los demás aún durante días o semanas después de que los síntomas hayan desaparecido o incluso si no tienen ningún síntoma. Es contagioso por los siguientes motivos:
- Por el contacto con las gotitas que contienen el virus, producidas cuando una persona que tiene la HFMD tose, estornuda o habla.
- Al tocar a una persona infectada o tener otro contacto cercano con esta, como besarse, abrazarse, o compartir tazas, vasos o cubiertos.
- Al tocar las heces de una persona infectada, como cuando se cambian pañales, y luego tocarse los ojos, la nariz o la boca.
- Al tocar objetos y superficies que tengan el virus, como las manijas de las puertas o los juguetes, y luego tocarse los ojos, la nariz o la boca.
¿Cuáles son los síntomas del virus de Coxsackie?
Los síntomas del virus de Coxsackie varían según el tipo de virus y la persona infectada. En general, pueden incluir:
- Fiebre.
- Comer o beber menos
- Dolor de garganta
- Malestar
- Llagas en la boca
- Sarpullido
¿Cómo prevenir el virus de Coxsackie?
La mejor manera de prevenir el virus de Coxsackie es seguir estas medidas de higiene:
- Lavarse las manos con frecuencia con agua y jabón, especialmente después de ir al baño, antes de comer y después de cambiar pañales.
- Evitar el contacto cercano con personas enfermas.
- No compartir vasos, cubiertos u otros utensilios.
- Desinfectar con frecuencia las superficies comunes del hogar, como pomos de puertas, juguetes y superficies de la cocina.
- Evitar nadar en aguas contaminadas.
Si presentas síntomas del virus de Coxsackie, es importante consultar a un médico para obtener un diagnóstico y tratamiento adecuados. El tratamiento generalmente se basa en el descanso, la rehidratación y el alivio de los síntomas.