¿Qué es la Inteligencia Artificial y cómo convivimos con ella todos los días sin darnos cuenta?

Cada vez es más común escuchar sobre Inteligencia Artificial (IA). Antes, gracias a la Ciencia Ficción, al mencionarse ese término lo más probable es que se pensara en películas como Yo, Robot o Terminator, en donde las máquinas se vuelven en contra de la humanidad.

Lo cierto es que la IA es cada vez más cotidiana y no necesariamente está puesta dentro de un robot humanoide. La encontramos todos los días en el algoritmo de nuestras redes sociales, en los asistentes inteligentes de nuestros dispositivos móviles e incluso en automóviles que conducen por sí mismos.

Se trata de una herramienta con muchísimo potencial. Al mismo tiempo, para muchas personas representa un riesgo si no se tienen en cuenta ciertos aspectos de regulación.

¿Qué es la Inteligencia Artificial?

Podemos definir como inteligente a una máquina que puede imitar las funciones cognitivas propias de la mente humana. Estas pueden ser percibir, razonar, aprender y, precisamente, resolver problemas.

El nacimiento de la IA, de acuerdo con el científico de datos Jeremy Howard , se remonta a 1956. Todo comenzó con un hombre llamado Arthur Samuel, quien quería hacer que su computadora pudiera ganarle a las damas chinas.

Arthur Samuel hizo que su computadora jugara contra él mismo miles de veces hasta que aprendió. De hecho, en 1962 su computadora fue capaz de ganar la competencia estatal de Connecticut, Estados Unidos.

Es por ello que a Arthur Samuel se le conoce como el padre del aprendizaje automático, conocido más por su término en inglés como Machine Learning.

Actualmente este Machine Learning funciona un poco distinto. Se crean algoritmos que aprenden a menudo a partir de datos en bruto. Para el filósofo Nick Bostrom, eso es básicamente lo que hace un bebé humano.

5 ejemplos de la IA en la vida diaria

Buscador de Google: Para que el sistema de búsqueda del gigante tecnológico funcione correctamente, es necesario el uso de IA. El sistema puede decidir qué mostrarte primero según tu historial de búsqueda o las páginas que visitas con mayo frecuencia.

Anuncios personalizados: ¿Te ha pasado que buscas un vuelo hacia algún destino y después los anuncios que te aparecen están relacionados con el tema? Hoteles en tu destino, actividades, renta de autos, etc. Esto también funciona gracias a la IA.

Algoritmo de redes sociales y servicios de streaming: Conforme más consumimos contenido de entretenimiento en redes sociales o servicios como Spotify o Netflix, más le enseñamos al algoritmo lo que nos gusta.

La IA del algoritmo observa cuánto tiempo dedicas a consumir ciertos tipos de contenido. En consecuencia, cada vez te ofrecerá más contenido relacionado al que más tiempo dedicas. Los servicios de streaming hacen lo mismo: te recomiendan una película o serie similar a tus gustos.

Texto predictivo en tu celular: Nuestros dispositivos móviles también están equipados con IA que nos ayuda a personalizar su uso. Conforme escribimos, nuestro teclado “aprende” cuáles son las palabras que usamos con mayor frecuencia y nos ofrece autollenado y autocorrecciones.

Servicios de navegación: Uno de los mejores ejemplos cotidianos para la IA es el uso de aplicaciones de Waze. Se trata de una aplicación móvil de mapas impulsado por GPS, pero que proporciona sugerencias de ruta e información relevante en tiempo real.

Waze utiliza la información que recopila gracias a las propias personas usuarias para compartirla en tiempo real. De esta manera, mientras más personas la usan al mismo tiempo, la información es más acertada.