Tras la apertura de los gimnasios, muchos se han preguntado sobre la efectividad de los cubrebocas al interior de las instalaciones, ya que aún no ha habido consenso sobre las probabilidades de contagio de COVID-19.
Por esta razón, varios especialistas concuerdan que si bien los ejercicios siempre deben ser de baja intensidad y con adaptación progresiva en el tiempo y en el esfuerzo para evitar problemas futuros de salud, sólo debe usarse cubrebocas quirúrgico.
De acuerdo con Alejandro Lucía, catedrático de Fisiología del Ejercicio de la Universidad Europea, el cubrebocas FFP2 está totalmente desaconsejado porque puede provocar ahogamiento leve.
Asimismo, Lucía explicó que es vital mantener las distancias y que los gimnasios sean amplios, también contribuye a una mayor seguridad frente a la pandemia.
Pero riesgo para la salud, refiere este catedrático, en principio no existe si la mascarilla es adecuada y la actividad no es de alta intensidad y siempre y cuando no se padezca alguna enfermedad, como un asma no tratado o alguna afección cardiovascular.
“El sentido común y la prudencia son básicos, y la mascarilla -siempre quirúrgica- puede producir sensación de agobio, pero el aire entra y si no se cometen excesos no hay riesgo de hipoxia (falta de oxígeno)”, dijo.
Además, explicó que no todo está tan claro, por ejemplo en la población infantil apenas hay estudios sobre la actividad física con cubrebocas.
El ambiente de incertidumbre generalizado ha llevado al Consejo General de la Educación Física y Deportiva (Consejo COLEF) a organizar un seminario virtual sobre el tema, con especialistas de todos los campos.
✔️El etiquetado frontal de alimentos es una medida clave para la prevención de la #obesidad
?Este 9/10 a las 10 enterate de los últimos avances en este tema. Participa la diputada mexicana Carmen Medel, autora de la ley de etiquetado de ese país
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