Por el inicio de la temporada de lluvias y ciclones tropicales de 2019, que irá de mayo a noviembre, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) implementó en los museos, zonas arqueológicas y sitios patrimoniales, el Programa de Prevención de Desastres en materia de Patrimonio Cultural (PrevINAH).
La iniciativa integra al menos a 60 expertos para el intercambio de información y la toma de medidas preventivas de cara a fenómenos meteorológicos o naturales que puedan representar amenazas para el patrimonio cultural.
El antropólogo Joel Omar Vázquez Herrera, coordinador nacional de Centros INAH, aseguró que diariamente, el PrevINAH recopila y difunde entre el personal que lo integra los informes emitidos por el Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred) de la Secretaría de Gobernación, y por Protección Civil a nivel federal, estatal y municipal.
El objetivo es ejecutar acciones preventivas como limpieza e impermeabilización de superficies que lo requieran, protección de áreas en procesos de excavación, resguardo de colecciones; o entre otras, el mantenimiento de registros para facilitar el flujo del agua pluvial.
Vázquez Herrera comentó que en el marco de la temporada de lluvias y ciclones tropicales 2019, se contempla el impacto de 33 fenómenos hidrometeorológicos: 19 en el océano Pacífico y 14 en el Atlántico; con nueve que se pronostican como huracanes de categorías 3, 4 y 5, el INAH se encuentra preparado para realizar acciones no únicamente en los estados costeros, ya que a menudo tales sistemas también tienen efectos al interior del país.
Otra prioridad actual del PrevINAH es la vinculada con contingencias volcánicas, para lo cual se mantiene estrecha vigilancia del Semáforo de Alerta Volcánica del Cenapred, así como de los informes de la academia, los Centros INAH y otras instancias.
El antropólogo explicó que a nivel nacional existen territorios como Oaxaca, que además de su naturaleza sísmica pueden atravesar por una emergencia de tormenta tropical, o la propia Ciudad de México, expuesta a movimientos telúricos, a la actividad volcánica del Popocatépetl o incendios forestales como los ocurridos en fechas recientes, los cuales, añadió, no representaron riesgo al patrimonio cultural.
El coordinador dijo que desde su instauración en 2002, como parte de las lecciones que en el instituto dejó el sismo de 1999, el PrevINAH ha mantenido una curva ascendente de aprendizaje.