Pomuch, Campeche: la comunidad que limpia los huesos de sus muertos
El sentimiento de miedo por la muerte que en otras partes se experimenta, en Pomuch se contempla con amor y respeto hacia quienes ya no están con ellos.
Éder J. GonzálezAunque para algunos extranjeros es un insulto no dejar descansar a los muertos, en Pomuch, Campeche, la tradición es limpiar los huesos de sus difuntos, para rendirle tributo y honor a los suyos.
La celebración del Día de Muertos se vive diferente en las distintas regiones de México, sin embargo, una de las más emblemáticas y misteriosas es la de esta entidad.
Cuando una persona muere en esta comunidad, es exhumada luego de haber permanecido tres años bajo tierra.
Los huesos son colocados posteriormente en una caja de madera en el interior de un nicho, y año con año los familiares los sacan para limpiarlos.
La tradición heredada de los ancestros mayas dicta que los muertos tendrán que estrenar vestimenta: que consiste en manteles de tela blanca con multicolores bordados que envuelven los restos óseos del difunto.
Para vestir a los muertos, los habitantes de esta comunidad incluso realizan una ceremonia especial.
El sentimiento de miedo por la muerte que en otras partes se experimenta, en Pomuch se contempla con amor y respeto hacia quienes ya no están con ellos.
La muerte para los habitantes mayas era considerada como un ciclo más dentro del universo, y no como el fin de una vida; era una transformación, pues para ellos nada termina con la muerte.
Es parecido a un largo recorrido en el viaje eterno, que tal vez se encuentra en este mismo mundo.
Según la tradición, año con año las almas retornan a la tierra para estar algunos días con sus seres queridos, quienes los agasajan con rezos y comida.
Sin embargo, la creencia lanza una advertencia: el espíritu puede entrar en furia si la familia no limpia los huesos durante los dos primeros días de noviembre.