Piedras a causa del medio ambiente
Las temperaturas extremas podrían estar relacionadas con un mayor riesgo de desarrollar piedras en los riñones, de acuerdo a un estudio del Hospital Infantil de Philadelphia, que sugiere que el cambio climático podría estar contribuyendo a que incremente la incidencia de este mal.
Los investigadores revisaron los historiales médicos de más de 64 mil personas de distintas edades que reportaron calcificaciones entre el 2005 y el 2008, y las cotejaron con los datos de las temperaturas en sus ciudades de origen.
Ana Paulina ValenciaLas temperaturas extremas podrían estar relacionadas con un mayor riesgo de desarrollar piedras en los riñones, de acuerdo a un estudio del Hospital Infantil de Philadelphia, que sugiere que el cambio climático podría estar contribuyendo a que incremente la incidencia de este mal.
Los investigadores revisaron los historiales médicos de más de 64 mil personas de distintas edades que reportaron calcificaciones entre el 2005 y el 2008, y las cotejaron con los datos de las temperaturas en sus ciudades de origen.
Se encontró que la aparición de piedras en los riñones incrementaba en los 20 días posteriores a un aumento extremo de la temperatura en las ciudades de Atlanta, Philadelphia, Chicago y Dallas. Sin embargo, no se encontró relación en Los Ángeles.
En Atlanta, Philadelphia y Chicago, también hubo más casos cuando las temperaturas fueron especialmente bajas.
Según los expertos esto podría estar relacionado con la deshidratación provocada por el calor extremo, que favorece la concentración de calcio y otros minerales en la orina.
Y en el caso del frío, permanecer en lugares cerrados, comiendo más y haciendo menos ejercicio, podría contribuir.
Además, la incidencia de las piedras ha aumentado consistentemente durante los últimos 30 años, lo que sugiere que el cambio climático podría estar relacionado con este ascenso en la frecuencia.
“Estos hallazgos apuntan a un problema potencial de salud pública, relacionado con el cambio climático global. Es probable que las temperaturas más altas pongan en mayor riesgo de padecer piedras en el riñón a las personas predispuestas a su formación”, señaló en el reporte Gregory Tasian, el autor principal del estudio.