Desde hace dos años, el menú de la “Cajita feliz” que ofrece McDonald’s incluye una bolsa de manzanas, como una alternativa a las papas fritas. También se redujo el tamaño de la porción de ese snack complementario en el popular menú infantil.
Otro gigante de la comida rápida, Carl’s Junior, introdujo “The Low Carb Six Dollar Burger”, una hamburguesa que se distingue por no llevar pan, sino un par de lechugas.
Burger King también desea aportar su granito de arena en la lucha contra la obesidad, o al menos en la oferta de alimentos un poco más… ¿saludables? La compañía introducirá las papas fritas bautizadas como “Satisfries” (un juego de palabras con satisfies –satisfacen, en inglés–, que tendrán 40 por ciento menos grasa y 30 por ciento menos calorías que las papas regulares que vende su rival, McDonald’s.
La cadena de comida rápida informó en su sitio Web que la receta de las “Satisfries” garantiza que estas papas fritas absorben menos cantidad de aceite, “el suficiente para mantenerlas crujientes por fuera y blandas por dentro”.
Sin embargo, según reportó la revista TIME, Burger King asegura que no promoverá las “Satisfrieds” como un alimento saludable, pues es un hecho que estas papas no quedan exentas de someterse al proceso tradicional de fritura.
El nuevo producto es obra de dos años de ingeniería alimentaria de la multinacional McCain Foods, que no podrá vender las “Satisfries” a otros restaurantes de comida rápida.
Estas nuevas papas fritas, que salieron a la venta en Estados Unidos esta semana, tienen 190 calorías, ocho gramos de grasa y 210 miligramos por un tamaño de porción grande.
