Después de pasar una noche en una prisión de Texas, el concierto que Fiona Apple dio en Houston el viernes 21 de septiembre se convirtió en el morbo de la prensa y algunos curiosos.
Dio la casualidad que yo tenía boletos para esa fecha desde hace unos meses atrás, así que sin querer estuve en el concierto del morbo post su arresto por posesión de drogas.
La experiencia me dejó con dos grandes conclusiones: 1) la intensidad interpretativa de Fiona es impresionante y 2) no hay peor público que el de Houston.
Juan Antonio Zertuche