James Blake hace música que nadie más está haciendo. En una era en la que pululan los proyectos electrónicos, no solo es un gran logro tener la habilidad de distanciarse de las corrientes más influyentes y dominantes de la escena musical que más rápido innova, sino ser capaz de estamparle un sello y un estilo tan original que destaca por encima de todos.
Juan Antonio Zertuche