Debajo de la pálida piel de Jamie Lidell, hay montañas de ritmo.
El disco más cercano al frenesí ochentero de Prince que se hará este año es “Jamie Lidell”, el homónimo sexto álbum del polifacético artista británico. Moviéndose violentamente entre el funk y el electropop, las 11 canciones del álbum están construidas para ser el soundtrack de una larga fiesta.
Esteban Castro