No olvides 
tomar café

Las bondades de la cafeína hacen que la mayoría de las personas sea “adicta” a esta droga legal.

Con moderación, el consumo de cafeína disminuye la fatiga –física y mental–, incrementa el estado de alerta, mejora el rendimiento motor y es un tónico para el cerebro, pues aumenta algunas capacidades cognitivas como concentración y memoria a corto plazo.

El café también dispara la creatividad. Incluso desde que la persona se dispone a prepararse una taza de café. 

Esta bebida ayuda a que las personas se desconecten a cualquier hora, en cualquier lugar. Y permite que la mente divague durante unos momentos, para después generar las mejores ideas.

Oliver Burkeman, columnista de psicología, escribió en The Guardian que “quizá la cafeína no relaja nuestra atención, pero sin duda su consumo lo hace. Los rituales del café, el entorno en el que se bebe, las creencias que tenemos acerca de este: es una combinación tan potente como el brebaje en sí mismo”. 

Tomar varias tazas de café al día puede servir de antidepresivo, ya que estimula la producción de ciertos neurotransmisores en el cerebro que tienen un efecto clave en el estado de ánimo, como la dopamina, la noradrenalina y la serotonina, de acuerdo a una amplia investigación de la Escuela de Salud Pública de Harvard. 

El estudio, publicado en julio de este año en The World Journal of Biological Psychiatry, reveló que el consumo de entre dos y cuatro tazas de café diarias parecía reducir el riesgo de suicidio en hombres y mujeres hasta en 50 por ciento.

El café perfecto

Para los amantes del café no hay algo peor que este se le enfríe al cabo de algunos minutos. Para todo hay solución y conservar la temperatura del café no es la excepción. 

PureTemp, de la empresa estadounidense Entropy Solutions, es una tecnología nueva que convierte los aceites vegetales en material de cambio de fase renovable (PCM, por sus siglas en inglés). 

Una de las aplicaciones de esta alternativa biodegradable es precisamente una taza de café. El Jefe de Química William “Rusty” Sutterlin explicó a Discover Magazine cómo este material mantiene la temperatura perfecta de esta bebida una vez que el usuario la vacía en PureTemp: 

“El PCM dentro de la taza se derrite, utilizando el calor del café como fuente de energía. Se tarda un minuto o dos para llegar a la temperatura óptima para beberse (…). Mientras el café se enfría por debajo de 140 grados, el PCM comienza a solidificarse de nuevo, liberando el calor almacenado nuevamente en el café, y manteniendo la temperatura perfecta para su consumo”.  

Pero si no tienes tiempo de prepararte un café o de esperar a que se conserve caliente, puedes disfrutar de la cafeína al rociarla sobre tu piel.

Los jóvenes Ben Yu y Deven Soni desarrollaron “Sprayable Energy”, un ingenioso aerosol de cafeína que te puedes aplicar directamente en la piel y, posteriormente, el cuerpo absorberá el líquido. Aparentemente, el spray de cafeína tiene un efecto que dura horas enteras en el organismo.

Sprayable Energy busca financiar fondos en Indiegogo, un sitio de crowdsourcing.