La ola de calor que se vive en la Ciudad de México (CDMX) ya ha establecido récords en cuanto a los registros de altas temperaturas; sin embargo, algunos se preguntan de qué otra forma puede afectar al cuerpo y una de ellas son los alimentos.
Y es que como es bien sabido, ante la ola de calor la deshidratación es uno de los síntomas más graves que puede tener el cuerpo y ello desencadena un cuadro donde sea necesaria la hidratación intravenosa.
Aunado a ello, el calor también afecta la alimentación ya que muchas personas pueden sufrir una infección al ingerir algún alimento con hongos y bacterias.
Por ello, es recomendable que los alimentos que se adquieren se deben consumir el mismo día para que estén más frescos, pues la fecha de descomposición se ve acelerada por el calor.
Por esta razón la UNAM emitió una serie de recomendaciones para evitar que los ciudadanos consuman algunos alimentos pues las infecciones estomacales aumentan durante esta temporada.
¿Qué alimentos pueden ser dañinos por el calor?
Mariscos: ya que debido a su sensibilidad al calor pueden descomponerse con facilidad.
Carne: sus niveles altos en proteínas y agua convierten a la carne en un objetivo fácil para las bacterias durante la época de calor.
Picante: El picante aumenta la temperatura corporal y puede hacer sentir más calor durante días calurosos.
Sal: Contribuye a la deshidratación de las personas.
Cafeína y alcohol: Ambos tienen efectos deshidratantes por lo que se recomienda sustituirlos por jugos naturales o agua.
En esta temporada de calor, las infecciones estomcales aumentan debido a la descomposición acelerada de los alimentos por las altas temperaturas.
En #LaUNAMresponde platicamos sobre las causas y los cuidados que temeremos tener.☀️🦠 2:30 y 6:30 @tvunam @quimica_unam pic.twitter.com/jKQ7iPu5lY— Rosa Brizuela (@RosaeBrizuela) March 14, 2024
Cabe recordar que la Secretaría de Salud de la Ciudad de México (CDMX) emitió una serie de recomendaciones ante las altas temperaturas que se registran y que, incluso, han roto récords; así como los puntos para identificar y atender los llamados golpes de calor.
En general son piel seca, pulso rápido, mareos, náuseas y confusión.
En el caso de los niños las características son llanto sin lágrimas, hundimiento en ojos, boca seca, saliva espesa e irritabilidad.
En las personas adultas, algunas de las señales de la deshidratación pueden ser taquicardia, somnolencia, agotamiento, además de la sensación fuerte de sed y boca seca.