Al nacer en 1993, en Hod HaSharon, Israel, Netta Barzilai creció bajo la influencia de los artistas de la última década del siglo XX y vio el ascenso de figuras estadounidenses como Christina Aguilera, Britney Spears, The Backstreet Boys, entre otros.
Ella soñaba con ser también una cantante pop, brillar musicalmente y destacarse por hacer arte, pero veía un impedimento que, tal vez, le haría la vida imposible en esta industria que buscaba catapultar celebridades: tener un cuerpo escultural, y la israelí, tenía sobrepeso.
Pero pasaron los años y, en la escena musical, surgió Adele como una de las primeras cantautoras que rompió el molde al demostrar que lo que importa es el talento, no el cuerpo. Posteriormente llegaron más y más artistas mujeres, una ola inevitable que derrocó al pop tradicional y su mercadotecnia hacia el físico.
“Creo que esa idea ya se acabó, es más allá de decir adiós, es algo ya muy atrasado, artistas como Lizzo, Billie Eilish, incluso, Megan Stallion o Cardi B, han roto el patrón y la forma. Cuando yo veía MTV de niña, solo veía un tipo de belleza, a mujeres obligadas a peinarse de la misma manera, yo me sentía oprimida”, describe Netta en videollamada.
Ahora, a más de 20 años de distancia de cuando surgió la oleada pop del 2000, Netta Barzilai agradece que esta ruptura se haya dado para darle voz y apertura a talentos como el de ella, y de muchas otras más mujeres, quienes han sido sexualizadas o vistas como pertenecientes a un género por el cuerpo que tienen.
Cuando Netta Barzilai ganó en su natal Israel un reality show pudo demostrar que tenía otra vertiente que ofrecer, el realizar música con una caja de efectos de sonido, para realizar beats y loops musicales, algo que la distingue hasta hoy.
“Esto hizo las cosas mucho más claras, yo hago lo que quiero, y nadie interfiere, y cuando tú eres tú, accidentalmente inspiras a otras personas, yo no esperaba ganar la competencia, pero así fue, además me llevó a Eurovisión, la cual también gané y es el Super Bowl musical de Europa, esto me hizo ser conocida en muchas casas, y sé que muchas niñas y niños han sido tocados por este mensaje, que para mí, lo es todo”, agrega la cantante.
Actualmente la artista presenta su nuevo sencillo “CEO”, el cual, precisamente, habla de tomar las riendas de sí misma. Aunque no tiene contemplados planes de hacer giras o presentaciones para el siguiente año, tiene seguro que seguirá presentando nueva música que hizo durante el confinamiento.
El empoderamiento personal
Con “CEO”, Netta Barzilai quería reencontrarse a sí misma, focalizarse en tomar las riendas de su carrera, y que nadie le dijera qué hacer con su música. Ella comenta que este track compuesto durante el confinamiento le sirvió para dejar todo lo que había estado viviendo en los últimos años e iniciar de nuevo.
“Es una historia curiosa, tenía en la cabeza el número de teléfono 049789789, porque mi madre me enseñó que, para aprenderme los números, tenía que cantarlos, y los empecé a repetir, sonaba tan sexy, como percusión, que le hablé a mi productor y se los repetí, creo que es una coincidencia y empecé a buscar más de estos números”, explica Netta Barzilai.
Ella encontró un significado personal en esta numerología, la cual le da un liderazgo y control, por ello escribió la canción, para verse a sí misma como la directora ejecutiva de su propia vida; el verdadero reto llegó cuando tuvo que hacer el videoclip y bailar frente a la cámara.
“Decidí bailar como todos los demás, y para mí fue un gran reto, nunca lo había hecho, sólo había sentido esta vibra al interior de mi cuerpo, y no me había permitido hacer una coreografía porque sabía que sería una pesadilla, porque soy pésima coordinándome y siguiendo instrucciones, sí así es, tengo problemas con la autoridad”, narra entre risas.
Netta Barzilai recurrió a la coreógrafa Eden Shabtai, quien previamente había trabajado con Chris Brown, Ariana Grande, Demi Lovato y Pitbull, entre otros. Ella se puso a trabajar arduamente durante seis meses para lograr los movimientos que se requerían para grabar su sencillo en video.
“No soy una chica pequeña que pueda brincar fácil hacia ella, así que hice un trabajo muy, muy, muy difícil, pero, al final, se sintió tan bien ver el video, que pude bailar, fue épico el lograrlo, y este es el mensaje principal, me quería probar a mí misma que cualquier cosa que quieres hacer en la vida, la puedes lograr”, puntualiza.