Después de tres años de no aparecer en la pantalla grande, Blake Lively vuelve con “The age of Adaline”, que se estrena el 8 de mayo en México.
Lively es la protagonista de la historia sobre una mujer que nunca envejece, por lo que huye constantemente de sus intereses románticos quienes, claro, sí mueren.
El filme es dirigido por Lee Toland Krieger, y a lo largo de la película, Adaline permanece como una mujer de 29 años, pero Lively apenas va a cumplir 28 el próximo agosto.
Así como su personaje que permanece jovial, en la vida real Blake Lively es un espíritu libre y joven.
Pertenece a una familia californiana que siempre ha estado en el negocio del entretenimiento, ya que su padre es actor, su madre es mánager, y sus cuatro hermanos y hermanastros han actuado en algún momento.
De hecho fue su hermano mayor quien la involucró directamente en la actuación, según le contó en entrevista a Ben Affleck para la revista Interview.
“No quería ser actriz porque toda mi familia lo hacía”, le platicó a Affleck, quien la dirigió en “The Town” en el 2010, “pero luego él (su hermano) estaba repasando diálogos con su amigo y me convenció de ir a una audición”.
La primera, aseguró, fue por ser “buena” pero terminó yendo a más, mientras fingía que pertenecía a la agencia de su hermano. Así obtuvo su primer trabajo en “The sisterhood of the traveling pants” a los 17 años.
“Pero en lugar de seguir con la actuación, decidí que quería terminar mi último año de preparatoria. Pensé ‘terminaré la escuela y pospondré ir a la universidad por un año y lo intentaré’ (actuar)”.
Sin embargo nunca siguió con su educación. En cambio, tuvo pequeños papeles en películas no muy memorables como “Accepted” (2006), “Elvis and Anabelle” (2007) y la secuela de “The sisterhood…” (2008).
Su mejor momento llegaría con la serie “Gossip Girl” en el 2007, donde actuó como Serena van der Woodsen, una rica adolescente neoyorquina.
La serie ganó fama por sus momentos fashionistas y catapultó a Lively como ícono de la moda.
Aunque, como le dijo a Affleck sobre su glamorosa visita a la Semana de la Moda en París hace un par de años, ella prefiere viajes más relajados. Algo similar a lo que hizo a los 15 años con su hermano, cuando ambos fueron de backpackers por Europa.
Pero Lively tampoco puede quejarse. Desde el 2012 está casada con Ryan Reynolds, con quien tiene una bebé de meses, James, y una casa en Bedford, New York.
Su boda figuró en el libro “Martha Stewart Weddings”, que se enfocó en los platillos del evento. La actriz es fan de Stewart y, como repite en cada entrevista, de la comida.
“De hecho creo que esa es la razón por la que me interesé en la actuación: la comida gratis”, aseguró, “recuerdo literalmente estar en mi primer trabajo y decir ‘¡sí, tengo servicio de comida cada día!”.
Su blog de estilo de vida, Preserve, se enfoca también en esta pasión de la californiana, además de vender objetos únicos y hablar sobre sus esfuerzos filantrópicos.
El sitio en línea le ha valido críticas, de la misma forma en que los detractores hablan de otra actriz y gurú, Gwyneth Paltrow. Pero Lively no da señales de que esto le afecte. El blog es uno de sus varios intereses y parece contenta.
“Las cosas salieron bien”, le dijo a Affleck en Interview, una muestra de la actitud que ha tenido a lo largo de su carrera.