Narran vida y legado de Pola Weiss, la artista que desafió convenciones

Cada palabra y movimiento de la artista visual Pola Weiss destilaban un magnetismo caleidoscópico en quienes la observaban. Con “su escuincla” al hombro, como cariñosamente llamaba a su cámara, inadvertidamente teñía la perspectiva de mirar y comunicar. Gracias a su singular visión, se convirtió en la precursora de lo que hoy se conoce como videoarte.

Este personaje inspiró la creación de PolaWeiss, la primera película dirigida por Alejandra Arrieta que relata la vida y legado de la pionera del videoarte en México. La cinta tendrá su estreno en la Ciudad de México como parte de la 18 edición del Festival Internacional de Cine Documental (DocsMX) el viernes 13 de octubre en el Cine Lido.

A más de treinta años de su trágica muerte, su historia por fin es contada a través de los textos, dibujos, cartas y fotos que conforman su archivo personal, revelando la gran importancia y vigencia de su legado.

“Pola es un personaje muy atractivo, sobre todo para las mujeres, porque fue una mujer que vivió como ella quiso y decidió”, cuenta Arrieta en entrevista con Reporte Índigo.

Para la cineasta, descubrir a Pola, más que un encuentro artístico, fue un enamoramiento, un vínculo emocional que la llevó a crear un documental dedicado a esta figura cautivadora.

La directora no solo se sumerge en la obra artística de Pola, sino que también explora la complejidad de su vida desde una perspectiva más allá de lo superficial.

“La conocí trabajando en la curaduría de una exposición sobre ella. Me voló la cabeza descubrir a una artista mexicana que había experimentado con la imagen en movimiento de manera súper profesional, que además fundamenta su arte desde un lugar teórico, no con una formación de artista, más bien se aproximaba al fenómeno de la televisión desde la sociología”, explica la directora.

Un relato sobre el feminismo

En el relato de la directora, la feminidad de Pola se manifiesta como un eco que resuena con los feminismos contemporáneos. La historia de Pola se convierte en un testimonio valioso, con temas como la maternidad, la lucha por la creación y los desafíos de la salud mental, contribuyendo al diálogo feminista.

“En su momento, ella no se definía como feminista,  a mí me parece que  no estaba de acuerdo con el feminismo de la época. Esto es como una de las cosas más en la ficción que Pola fue precursora. Hoy en día sus aportaciones resuenan más con los nuevos feminismos, medio elitistas de la época.

“Yo creo que  hoy en día podemos hacer una lectura de su vida y de su obra. Obviamente yo me considero feminista y reconozco eso en Pola, pero de repente ha habido confusión con el término, a lo largo de la historia ha sido una etiqueta rara, a veces, para algunas mujeres, pero es necesario activar la conversación también en ese sentido”, detalla Alejandra.

Arrieta destaca la dualidad que enfrenta Paula al dividirse entre ser madre y creadora, un dilema que resuena en la esencia misma de su obra.

En la cinta, que se complementa con fragmentos de videos caseros de Pola Weiss, donde se le ve en ambientes íntimos junto a su familia y en los que revela la complejidad de temas cruciales como el aborto, la psiquiatría y la salud mental.

“Es interesante cómo a lo largo de su vida le pasaron muchas cosas que también son temas muy relevantes para el feminismo contemporáneo, pues en su momento la veían como una loca”, explica.

Su mirada desde la admiración

Arrieta destaca la fascinación que siente al explorar la vida de Paula, reconociendo la conexión profunda entre su vida y su obra. Paula, una figura que desafía las convenciones, se convierte en un faro de convicción para Arrieta, inspirándola a perseverar en su propio camino creativo a pesar de los obstáculos.

En el relato, Arrieta también aborda la complejidad de Pola como ser humano. Aunque la admira como artista, reconoce la falta de desarrollo en ciertos aspectos espirituales, revelando las sombras que también forman parte de su historia. La cineasta abraza la tarea de encontrar un equilibrio entre mitificar a Paula y revelar su humanidad más profunda.

“A mí me ha inspirado mucho su arte, ella lo llevó así hasta las últimas consecuencias. Su vida y  arte estaban demasiado entrelazados y bueno, creo que también eso  suma a la parte trágica de su historia”, cuenta Arrieta.

La influencia de Paula en la vida de Arrieta es innegable. A través del proceso de documentación, Arrieta descubre no sólo la figura pública de Paula, sino también la mujer detrás de la leyenda. Este viaje no solo es un tributo artístico, sino un impulso para explorar formatos más experimentales y desafiar las convenciones cinematográficas, inspirándola a explorar el cine experimental y el videoarte.

Con el documental listo para proyectarse, Arrieta comparte su deseo de que la audiencia vea más allá de la superficie de Paula. Quiere que la gente conozca la profundidad de su historia, más allá de su belleza y excentricidades, destacando su importancia en la historia del arte.

La directora comparte su experiencia dedicando años de su vida a contar la historia de Paula, reconociendo la facilidad de crear una figura mítica debido a los elementos clásicos de tragedia en su vida. Destaca la importancia de equilibrar la idealización con la exploración de los matices humanos, buscando mostrar la complejidad de Pola como persona.

Arrieta reflexiona sobre la necesidad de profundizar en el lado oscuro de Paula, más allá de la superficialidad de su belleza, la forma en que murió y su habilidad para bailar ante la cámara.

“A mí me sigue inspirando esa convicción de seguir creando a pesar de los obstáculos. Pero no solo como artista, sino como mujer, académica, investigadora y maestra”, concluye.