Murió Mukhtar, el perrito que era conocido como el “Hachiko de Crimea”. El lomito esperó por el regreso de su dueño por más de diez años en la localidad de Yalta.
La muerte del canino fue confirmada hace algunos días por la comunidad de Yalta. En este lugar Mukhtar ganó popularidad e hizo muchas amistades con las personas locales y visitantes de la ciudad costera.
¿Por qué le dicen el “Hachiko de Crimea”?
Poco más de diez años atrás, Mukhtar era muy apegado a su dueño. Lamentablemente, en 2011 él murió ahogado mientras realizaba sus actividades como socorrista del Mar Negro. Como consecuencia, el perrito quedó sin su cuidador principal.
Desde entonces el lomito visitó constantemente la zona costera, donde permanecía durante algún tiempo mientras miraba al mar. Las personas locales suponían que se dedicaba a esperar el regreso de su querido dueño.
#Conmovedor ⚫ ¡ADIÓS, MUKHTAR! 👋🏻🐶
En 2011, el dueño de este perrito falleció ahogado en el Mar Negro, en Crimea. A partir del desafortunado suceso, cada día durante doce años, Mukhtar esperó frente al océano la llegada de su amo. Hace unos días, el peludito falleció… y ahora… pic.twitter.com/Ihu0L9aZb5
— Nuestro Diario (@NuestroDiario) September 14, 2023
Al notar el curioso comportamiento del perrito, comenzaron a apodarlo como “Hachiko”, dada la similitud con la historia del famoso perro akita en Japón. Él también esperó por el regreso de su dueño durante nueve años antes de finalmente morir.
Tras los más de 10 años de espera, Mukhtar murió, por lo que los habitantes del lugar decidieron realizar una colecta con la intención de levantar una estatua en su honor. Esto mismo sucedió con la estatua de Hachiko en Japón.
“Es una gran pérdida para nosotros, porque Mukhtar conocía y quería a casi todos los que venían a nuestra ciudad”, dijo Yanina Pavlenko, jefa de la administración local de Yalta al medio RT.
Según la información compartida con dicho medio, el lomito siempre fue muy cercano y amable e incluso juguetón con las personas de la ciudad. Asimismo, llegó a desarrollar cercanía con Víktor Malinovski, un trompetista callejero a quien acompañaba durante sus presentaciones.
