Más de 100 mil elefantes murieron en África a manos de cazadores ilegales entre 2010 y 2012, advirtió la organización Save The Elephants el año pasado. ¿El motivo? Sus valiosos colmillos.
En un intento por desalentar la caza furtiva, el presidente de Kenia Uhuru Kenyatta ordenó quemar 15 toneladas de colmillos de elefante en el Día Mundial de la Vida Silvestre.
Dicha cantidad de marfil, con un valor en el mercado negro de 30 millones de dólares, es la mayor que se ha destruido en el país africano.
“Muchos de estos colmillos pertenecieron a elefantes que fueron arbitrariamente sacrificados por los delincuentes”, lamentó ayer Kenyatta.
El mandatario denunció que 25 años después de la histórica prohibición del comercio de marfil, la nueva demanda de mercados emergentes amenaza a los elefantes y rinocerontes de África. Agregó que las naciones africanas están preocupadas por la magnitud de la amenaza a las especies en peligro de extinción.
Solución parcial
El jueves pasado, China impuso una prohibición por un año a la importación de productos de marfil en reacción a las críticas de que la avidez de los chinos por el marfil amenaza la existencia de los elefantes en África.
Y es que la mayor demanda de marfil ha motivado en los últimos años a los cazadores ilegales a matar cada vez más paquidermos en todo el continente.
(Con información de AP)