Luis Estrada, “un sátiro indomable que incomoda al poder”

Por la fuerza de su mirada y humor corrosivo, el Festival Internacional de Cine de Guanajuato reconoció al director con la Medalla de la Filmoteca de la UNAM y la Cruz de Plata de Más Cine
Karina Corona Karina Corona Publicado el
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El cine de Luis Estrada bien puede verse como un espejo, en el cual se refleja la sociedad mexicana, sus problemáticas, ambiciones, pero también el alma de lo que significa ser mexicana o mexicano; una realidad que, quizá, sólo se puede digerir a través de la comedia.

Por su ambición y ser de los pocos directores vivos cuya óptica resulta innovadora y transgresora, el Festival Internacional de Cine de Guanajuato le rindió esta noche un homenaje al cineasta en el Teatro Bicentenario, espacio que no llenó la mitad de su capacidad para este evento, en donde estuvieron algunos amigos de Estrada y público en general.

Al tomar la palabra, el director confesó que fue muy abrumador ver el esfuerzo de toda una vida resumido en un video de 4 o 5 minutos, removió cosas muy importantes de lo que ha significado para él el cine, pues es su vida y lo que, seguramente, hará hasta el día que dé su último aliento.

“Cuando Sara me anunció del homenaje, y luego el premio, empecé a tener unos pensamientos un poco oscuros. Pensé que me estaban adelantando y que se podía convertir en un homenaje póstumo.

Con tantos años en el cine, cada vez que a alguien se le hacía un homenaje, daba esa sensación que ya estaba en las últimas, y que lo más probable es pensar que tarde o temprano se retiraría, para no decir lo más feo, que pasaría mejor vida, espero que no sea mi caso, tengo muchas cosas que contar” expresó en cineasta.

El director de La ley de Herodes y El Infierno comentó que a lo largo de su carrera ha tratado de hacer lo mejor posible, algunas veces con más éxito, algunas veces con menos, pero siempre trata de dar lo mejor de él, razón por la cual espera que sus películas sean recordadas.

“Hago mis cintas con mucha honestidad, pero también con una voluntad muy clara de independencia y de libertad. Creo que estas películas, ninguna es bonita de ver, o no le gustarán a todos, pero creo que han ido a lugares donde nadie se había atrevido”, sostuvo.

Má allá de las anécdotas que se han dicho sobre sus cintas, para Estrada, el cine, en general, se tiene que hacer con libertad y tiene que reflejar lo que pensamos o imaginamos alrededor de un país.

“Me emocionó mucho irme de México a hacer una carrera afuera, y obté que no, porque lo que yo quería era hacer cine mexicano, contar mis historias, y contarlas efectivamente sin miedo, con independencia y libertad” apuntó.

De igual forma siempre ha tratado de verlas para que no exista una autocensura sobre temas que, hasta le fecha, son considerados como tabú.

“Hay temas que la gente no se atreve a decir. Para mí no es una cosa de valentía o de presunción. Son las películas que creo que necesitaba hacer. Para mí era importante contar esas historias, y el que haya encontrado esa identificación con el público, pues para mí es muy importante, porque además las películas ahí están y se siguen viendo”, confesó.

La actriz y actual Presidenta de la Academia Mexicana de Cinematografía, Leticia Huijara subrayó que con Estrada ha estado en las buenas y en las malas, pues sufrieron censura por parte de los “altos mandos del Gobierno”, al impedirles que saliera la cinta La Ley de Herodes. También lo menciona cómo ese caudillo indomable que ha hecho trabajos cinematográficos que, quizá, ningún otro ha podido realizar hasta ahora.

“Es un hombre que quiere a su equipo, se lo demuestra y los quiere mucho. Fielmente sí mismo, sigue usando las mismas camisas, pero sobre todo es un director que se divierte dirigiendo”, relató Huijara.

Durante el homenaje, donde se mostró un video con algunas de sus películas más destacas, también asistieron los actores Cuautli Jiménez y Krystian Ferrer, quien en la cinta El Infierno, dio vida a El Diablito.

Dijo que trató de uno de sus personajes más importantes que marcaron un parteaguas en su carrera.

“Estaba muy nervioso, porque me habían ofrecido un protagónico y Luis me dijo “voltea y ve quién está detrás de ti, Damián Alcázar, Joaquín Cosío” , y puso uno de los narcocorridos que están en la película, yo vi a un niño jugando.

“Eso me hizo recordar que en arte no existe la voluntad y progreso. Me dejó en una especie de limbo y preguntarme qué nos hace seguir en un mundo que es tan violento, pero siempre regreso a esta imagen que tengo de Luis, que es jugar como un niño. Te quiero agradecer por haberme dado la delicia de trabajar contigo, por permktirme ser reparte de esa familia.

Por último, el actor Cuautli Jiménez, quien participó como La Jacinta en Qué viva México, le agradeció por darle la oportunidad de estar en su más reciente filme.

“Como espectador destacao su agudeza y valentía en este país de caudillos incomodar al poder”, concluyó.

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