Los Pokes de Facebook pasaron de moda hace años, pero una aplicación lanzada a principios de abril de este año, con una idea similar, ya tiene más de un millón de usuarios y fue víctima de hackers, lo que se considera una medalla de honor para su éxito como aplicación.
Su nombre es “Yo”, término que en inglés equivale a decir “Hey” o “Tú”, y tiene un funcionamiento sencillo.
Entras a la aplicación, das click al nombre de un amigo tuyo que también la tenga, y este recibe un “Yo” de tu parte. Por increíble que parezca, eso es todo.
Sus usuarios lo aman porque es un manera fácil de decir a otro que estás pensando en él, avisarle a tu mamá que ya llegaste a tu destino o solamente molestar un poco.
Al parecer la clave del éxito estuvo, precisamente, en su simplicidad. Y esta ocasionó que la app se volviera viral en muy poco tiempo.
Así que cuando unos hackers la atacaron el fin de semana pasado, sus sistemas de seguridad no estaban listos.
“Podemos obtener el teléfono de cualquier usuario de ‘Yo’ (de hecho le mandé un mensaje al fundador, y me llamó). Podemos mandar ‘Yo’s desde sus cuentas, y mandar spam de tantos ‘Yo’ como queramos”, dijeron a TechCrunch los estudiantes de Georgia Tech que traspasaron el sistema.
Or Arbel, quien es el creador de “Yo”, confirmó que la aplicación tenía problemas de seguridad, y afirmó que estaban trabajando en ello. Este lunes, aseguró que todo estaba bien, y que consideraba el asunto una buena señal.
“Tuvimos la suerte de que se infiltraron en una etapa temprana y ya arreglamos el problema. Cuando te unes no te pedimos tu correo, nombre, cuenta de Facebook o información persona, tu única identidad es tu nombre de usuario”, dijo.
Incluso dar tu número de teléfono es opcional, solo si quieres que “Yo” encuentre a tus amigos a través de tus contactos. Así que quienes no usaron esa funcionalidad no se vieron en problemas.
Según Arbel, la conversación que tuvo con el hacker fue productiva, y recibió información sobre los detalles del ataque, ya que la finalidad de los jóvenes era demostrar que la seguridad podía mejorar. De hecho, uno de ellos ahora está trabajando con él.