La navidad del 2015 no fue la misma para miles de personas que encontraron en su sistema de streaming favorito una serie que les sacudió por completo, no era una comedia, pero tampoco un drama, sin embargo, hasta la fecha, pocas producciones se le equiparan a “Making a murderer” por reflejar que la realidad sorprende siempre más que la ficción.
Con 10 capítulos documentales, las cineastas Laura Ricciardi y Moira Demos habían recopilado años de material en video para hacer este testimonial acerca de Steven Avery, quien fue inculpado por acoso sexual e intento de asesinato a Penny Beerntsen y cumplió una condena de 18 años en prisión, pero logró defenderse y ser exonerado por evidencia de ADN en 2003.
Todo parecía ser perfecto para Avery, pero dos años después fue nuevamente llevado tras las rejas por presuntamente asesinar a Teresa Halbach; en 2007 se le condenó por el delito que él dice no haber cometido y además también se añadió a su sobrino Brendan Dassey como cómplice.
Al término de esta primer temporada Avery dice que continuará dando pelea a los tribunales, y es aquí donde comienza esta segunda temporada, que llega después de tres años de haber estrenado el documental de largo aliento en Netflix.
En esta nueva temporada de 10 episodios, las realizadoras muestran parte de la avalancha mediática que se vino tras la liberación del serial en Netflix, además de que Avery ahora cuenta con un brazo legal mucho más firme para su defensa, la abogada Kathleen Zellner que es considerada una de las mayores defensoras en condenas injustas en Estados Unidos.
Aunque tuvo un cálido recibimiento por parte de la crítica y el público, la primer temporada de “Making a murderer” fue criticada por el ex fiscal de distrito Ken Kratz que llevó el caso contra Avery y Dassey, porque él señalaba que la serie ignoró las pruebas incriminatorias hacia los dos hombres que se presentaron en juicio.
Las directoras decidieron darle voz a Kratz para que ahora diera su versión ante las cámaras, pero él se negó a participar en el serial.
“Francamente, le dimos al fiscal el tiempo al aire que teníamos disponible… Le escribí a Ken Kratz en 2006 para invitarlo a participar. Nunca recibí una respuesta directa a mi carta. Pero, ya sabes, tuvimos la suerte de que se estuvieran celebrando públicamente tantos eventos para poder filmarlos y dejar claro cuál era la perspectiva de Ken Kratz en la historia”, dijo Ricciardi en entrevista para CBS.
Este nuevo apartado de “Making a murderer” ya se encuentra disponible en Netflix a partir de hoy con sus nuevos 10 episodios.