Los niños del Holocausto

Dentro de las cuatro paredes del Museo Histórico Judío y del Holocausto en la Ciudad de México se encuentra Mario Escobar, un escritor madrileño que hace de cada línea un posible cambio.

El ambiente se siente tenso y las paredes inmersas de imágenes que muestran a judíos reprimidos y nazis desafiantes, logran hacer que a más de uno se le enchine la piel.

“Los niños de la estrella amarilla”, el libro escrito por Mario Escobar, simboliza esa oportunidad de recordar y poder cambiar un mundo donde todos han olvidado y, por ende, han declarado la nueva guerra.

Azaneth Cruz Azaneth Cruz Publicado el
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“Soy pesimista a los cambios sociales producidos por un régimen político, pero soy muy optimista respecto a las personas. Creo que las personas podemos hacer muchas cosas”
Mario EscobarEscritor e historiador
“Cada generación tiene que volver a aprender sobre la historia (...) cada generación que empieza de nuevo como tabla rasa tiene la oportunidad de cambiar el mundo o de empezar uno nuevo”

Dentro de las cuatro paredes del Museo Histórico Judío y del Holocausto en la Ciudad de México se encuentra Mario Escobar, un escritor madrileño que hace de cada línea un posible cambio.

El ambiente se siente tenso y las paredes inmersas de imágenes que muestran a judíos reprimidos y nazis desafiantes, logran hacer que a más de uno se le enchine la piel.

“Los niños de la estrella amarilla”, el libro escrito por Mario Escobar, simboliza esa oportunidad de recordar y poder cambiar un mundo donde todos han olvidado y, por ende, han declarado la nueva guerra.

“La novela está llena de mensajes que dicen que el poder de la gente común puede hacer un cambio. No los gobiernos”, dice Mario Escobar, también autor del libro “Canción de cuna de Auschwitz”.

Como un rayo que entra por la ventana, el más reciente libro de Mario Escobar habla sobre la historia de dos niños judíos que huyen de los nazis y que son protegidos por los habitantes del pequeño pueblo francés Le Chambon Sur Lignon, el cual rescató a más de 5 mil menores judíos de las manos de los alemanes.

La memoria de una comunidad unida que decide rescatar a los pequeños judíos que logran llegar ante la imposición de los nazis, representa para el escritor una esperanza para la sociedad actual.

Embarcado en un viaje que lo llevó a recorrer los pueblos de Lyon junto a otros historiadores para conocer a profundidad el Holocausto, Mario decidió rendir homenaje a todos los niños sobrevivientes y a las personas que participaron en el rescate.

“Quería hacerle una especie de homenaje a ellos, quería que a través de la historia de los niños se pudiera ver esta Europa lastimada y ocupada por los nazis”, comparte el autor de “Los niños de la estrella amarilla”.

Para el escritor, con esta obra es importante dejar claro que la ocupación que muchos países sufrieron no solamente había sido física, sino también psicológica y sociológica.

“El libro muestra la capacidad que tenemos todos para cambiar el mundo”, afirma el también escritor de “El mesías ario”.

De la guerra a la actualidad

La muestra que dieron aquellos niños judíos y los ciudadanos de Francia al resistir al régimen más cruel de todos los tiempos mediante la lucha pacífica, fue un gran ejemplo para una Europa que –después de la Segunda Guerra Mundial– logró la paz.

Sin embargo, el olvido ante tal genocidio se convirtió en el peor mal de la sociedad actual.

“Estamos viviendo un tiempo muy parecido al periodo de entreguerras de la Segunda Guerra Mundial. Crisis económicas, crisis de liderazgo, crisis de valores y una gran desorientación de la sociedad… El posmodernismo y la posverdad han creado una confusión para la sociedad entre el bien y el mal”, expone Mario Escobar.

La confusión de la que habla el autor se puede reflejar en la creación de grupos extremistas como el que tenía la candidata francesa Marine Le Penn, el estadounidense Donald Trump, el famoso Brexit y otros que buscan sanar a una clase media social desesperada, a través de chivos expiatorios como los inmigrantes y los musulmanes.

“Los grupos extremistas actuales descargan en los chivos expiatorios la frustración de la sociedad, en especial la de una clase media que ha perdido poder adquisitivo, que no puede competir con la globalización y que termina cayendo en estos ultranacionalistas que buscan dividir para su propio beneficio personal”, explica.

Con el libro “Los niños de la estrella amarilla”, el escritor busca que cada persona forme su propia opinión ante los hechos que le rodean y que se dé cuenta que es a través de la lucha cívica y pacífica de la sociedad que se logrará hacer el cambio. Pero –no– con un gobierno de por medio.

“Soy pesimista a los cambios sociales producidos por un régimen político, pero soy muy optimista respecto a las personas. Creo que las personas podemos hacer muchas cosas”, afirma Escobar.

Conversación entre generaciones

Para el autor de “Los niños de la estrella amarilla”, uno de los aciertos de los pequeños que fueron salvados por los franceses en aquel tiempo radicó en que ellos no cayeron en los errores de sus padres o abuelos y decidieron frenar una probable tercera guerra mundial, construyendo en Europa el periodo más largo de prosperidad.

“Cada generación tiene que volver a aprender sobre la historia. Pensamos que ya se habló mucho del Holocausto, que ya se habló mucho de estos temas, pero cada generación que empieza de nuevo como tabla rasa tiene la oportunidad de cambiar el mundo o de empezar uno nuevo”, expone.

Entonces, el error de caer una y otra vez en los conflictos de guerra se debe a la falta de memoria de la humanidad, motivo por el cual Mario Escobar considera importantes a los libros.

“Cuando no nos conformamos empezamos a cambiar”, afirma el escritor español.

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