Latinoamérica verde
Hablar de la mitigación del cambio climático en Latinoamérica es considerar la deforestación, agricultura y los cambios de usos de suelo, prácticas que generan la mayor parte de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI).
De las 4.2 gigatoneladas emitidas por los países de América Latina y el Caribe en 2012, aproximadamente 49 por ciento respondió al uso de suelo y la pérdida de masa forestal, de acuerdo al Instituto de Recursos Mundiales (WRI, en inglés).
Eugenia RodríguezHablar de la mitigación del cambio climático en Latinoamérica es considerar la deforestación, agricultura y los cambios de usos de suelo, prácticas que generan la mayor parte de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI).
De las 4.2 gigatoneladas emitidas por los países de América Latina y el Caribe en 2012, aproximadamente 49 por ciento respondió al uso de suelo y la pérdida de masa forestal, de acuerdo al Instituto de Recursos Mundiales (WRI, en inglés).
Entre el 2001 y 2012, la expansión agrícola en la región fue responsable de la pérdida de 36 millones de hectáreas de bosques y praderas.
Al menos 200 millones de hectáreas de tierras están degradadas en América Latina, “sobre todo como resultado de prácticas agrícolas insostenibles”.
Por ello, México, Colombia, Guatemala, Perú, Ecuador, Chile, Argentina y Costa Rica se han comprometido a replantar 20 millones de hectáreas para el 2020, como parte de la iniciativa “20×20”, que cuenta con nuevas inversiones privadas de 365 millones de dólares.
Se apoyará “la reforestación (natural y asistida), la conservación de los bosques, así como la deforestación evitada como elementos de un proceso de restauración integral”, explica el WRI.
“Consciente de los diversos grados de degradación de la tierra en la región, la iniciativa también apoyará los esfuerzos para recuperar la funcionalidad de la tierra (la conservación del suelo y la recuperación; el almacenamiento de carbono; la retención de agua y hidrologías estables; conservación y recuperación de la biodiversidad) a través de la agroforestería, sistemas silvopastoriles y otros planes de uso de la tierra sostenibles”.
El sistema agroforestal combina árboles con cultivos agrícolas y/o animales, y el silvopastoril mezcla árboles con animales.
“Esto solo es el comienzo de la restauración en América Latina y el Caribe”, dijo a The Guardian Walter Vergara, ex líder del Grupo Climático Global de Expertos (GET) del Banco Mundial que contribuyó en la planeación del proyecto con el WRI.
“Esta meta inicial ayuda a establecer la importancia de abordar las dinámicas de la degradación de la tierra en la región, y con suerte, conducirá a objetivos más grandes y ambiciosos en los próximos años”.