Aunque se sabe que nuestro país está entre los 25 más peligrosos para las mujeres por la cantidad de feminicidios registrados, y las campañas con slogans como “Ni una más” continúan, las mujeres siguen siendo asesinadas.
Y es que de los 3 mil 892 asesinatos de mujeres que se cometieron en México entre el 2012 y el 2013, solamente 613 casos han sido investigados y de los mismos, tan solo el 1.6 por ciento recibió sentencia, de acuerdo a un informe del Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio.
Norma Andrade, fundadora de la organización sin fines de lucro Nuestras hijas de regreso a casa, así como Francisca Daniela, quien es directora de Pan y Rosas, señalan que el feminicidio en México es un asesinato “naturalizado”.
De hecho, Daniela puntualiza que “se ha ido naturalizando de una manera aberrante”.
El 46 por ciento de los casos que se estudiaron para detallar el informe del Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio corresponde a homicidios brutales como estrangulamiento, golpes, apuñalamiento e incineración. Mientras que el 16 por ciento de las mujeres asesinadas falleció a consecuencia de un balazo. El 38 por ciento fue por causas desconocidas.
En entrevista con el diario español El País, Norma Andrade indica que “matar a una mujer en cualquier parte del país es muy fácil. Total, no pasa nada, las autoridades no detienen a los asesinos, por lo tanto se creen con el derecho de privar a la mujer de la vida sin consecuencias”.
Como era de esperarse, los estados con mayor índice de asesinatos y violencia hacia las mujeres con Ciudad Juárez, Chihuahua, y el Estado de México.
Por muchos slogans e investigaciones que se hagan, la realidad es que en México la mujer es víctima de violencia y asesinatos de manera apabullante.