Nacida en Tottenham, Inglaterra, Adele estuvo cuatro años ausente (desde el 2011 hasta este noviembre) pero su música le seguía generando ganancias.
En 2011, luego de que su disco “21” se convirtiera en un furor a nivel mundial, y vendiera más de 31 millones de copias, la cantautora y filántropa británica se tomó un tiempo, debutó como madre y se concentró en ella misma.
Y le tocaba descansar, pues según la Federación Internacional de la Industria Fonográfica, “21” es el disco más vendido de la década. Y el más vendido del siglo en Reino Unido, con más de 4.7 millones de copias hasta marzo de este año, de acuerdo con la Official Charts Company.
En ese lapso de tiempo sabático, alejada del entretenimiento, trabajó en lo que hoy es su nuevo disco, “25”, pero sus ganancias al día eran de casi un millón 700 mil pesos.
Su compañía Melted Stone ganó 13.8 millones de libras (más de 296 millones de pesos) en el 2013, y MeltedStone Publishing, que cobra las ganancias por los derechos de sus letras y música, tuvo utilidades de 5.2 millones de libras (111 millones de pesos) ese mismo año.
Así, despreocupada, a sus 27 años Adele se centró en su salud, su pareja Simon Konecki y Angelo, el hijo de ambos.
De hecho, Sunday People publicó que la cantante prefirió descansar en casa y trabajar en “25”, que aceptar una oferta de 120 millones de dólares para realizar una gira mundial para la promoción de su tercer álbum.
Como de costumbre, triunfal
En noviembre de 2015 Adele regresó con “25”, cuyo sencillo “Hello” es una sensación viral que vendió más de 2.3 millones de copias solo en Estados Unidos en sus primeros tres días en el mercado.
Y es que tras dejar las bebidas gaseosas, los alimentos procesados, la carne y el cigarro, comenzó a hacer ejercicio y bajó 30 kilos por salud, a la par de preparar su más reciente producción discográfica.
Con el lanzamiento de “25”, Adele llegó para corroborar que sigue presente desde el 2006 y que esté o no de gira o presentando nuevo material, la industria de la música le pertenece.
Y el 2016 no será la excepción, ya que Adele emprenderá una gira mundial para promover “25”, y México es uno de los países que visitará. De hecho, la venta de boletos se agotó en cuestión de horas y el sistema de Ticketmaster se saturó mientras los fanáticos mexicanos adquirían sus entradas para verla en el Palacio de los Deportes, en la Ciudad de México, el 14 y 15 de noviembre del 2016.
Tradicional y sencilla
A nivel personal, Adele se caracteriza por ser sencilla, franca y risueña. Y a nivel profesional es muy tradicional, pues no es muy “amiga” de la era digital y la distribución de música en línea.
Aunque no es tan radical como Taylor Swift, Adele no aceptó que su nuevo material esté disponible en las plataformas de streaming.
Y es que la británica que domina instrumentos como bajo, guitarra, teclado y de percusión, declaró a la revista Time que ella en lugar de usar streaming, descarga la música y/o la compra en formato físico.
Inclusive calificó al streaming como “desechable”.Y aunque está consciente de que es el futuro, aseguró que “no es la única manera de consumir música (…) No puedo aliarme con algo que todavía no sé cómo me hace sentir”.
Sus discos anteriores, “19” (2008) y “21” (2011) sí están disponibles para streaming en Internet.