La TV del futuro
Cómo será la televisión en el 2025? Neil Hunt, Jefe de Productos de Netflix, compartió la semana pasada sus predicciones para el futuro de la pantalla chica, en una conferencia durante la Semana del Internet de Nueva York.
Ana Paulina Valenciahttps://www.youtube.com/watch?v=rHeavqmbDxA
Cómo será la televisión en el 2025? Neil Hunt, Jefe de Productos de Netflix, compartió la semana pasada sus predicciones para el futuro de la pantalla chica, en una conferencia durante la Semana del Internet de Nueva York.
Y, pese a que algunas de sus ideas podrían parecer imposibles, solo se tiene que recordar la historia de Netflix para reconsiderar el significado de “imposible”. La empresa pasó de ser un servicio de envíos de películas rentadas, a un pionero del streaming de video con series originales, e incluso llegó hasta los Premios Emmy y, ahora, múltiples plataformas y medios intentan imitarlo. Todo en menos de 20 años.
Más que TV a la carta
Según Neil Hunt, habrá más de 48 millones de canales disponibles, y debido a que el sistema actual no funciona –pues ninguno de los canales proporciona a los clientes todo lo que quieren ver, solo cuando quieren verlo– Netflix está trabajando en perfeccionar la personalización de su servicio.
Esto significa que los usuarios de la plataforma no tendrán que elegir qué es lo que quieren ver entre las opciones disponibles, sino que las recomendaciones serán más intuitivas y “conocerán” mejor a cada uno de los clientes.
Si normalmente disfrutas “House of cards” los fines de semana y te encanta ver capítulos aleatorios de “Friends” los martes para olvidar lo pesado que estuvo tu día, Netflix lo va a recordar y lo tomará en cuenta. Por lo que mostrará “una o dos sugerencias que son exactamente lo que quieren ver en ese momento”.
Además, Hunt está seguro de que los comerciales dejarán de ser necesarios para sostener a los proveedores de servicios similares. Y Netflix es la prueba de que cobrar una tarifa razonable como suscripción es suficiente.
El Internet, entonces, podría significar el fin del formato de televisión tradicional. Recordemos que la plataforma de streaming en línea ya tiene tratos con varias empresas de televisión por cable.
“El modelo libre de publicidad parece ser muy popular con los consumidores. Imaginamos que los Geicos y los Wendys y los Chevys tendrán que encontrar un lugar distinto para promover sus servicios en el 2025”, manifestó Neil.
También propuso una opción distinta: que los comerciales sean igual de específicos que las sugerencias del sistema, o sea que solo aparezcan a quienes necesitan el servicio en ese preciso momento. ¿Tacos a domicilio a las 3 de la mañana? No hay problema, Netflix también puede leer tu mente.
Los pequeños al poder
Pero la televisión por Internet no solamente traerá grandes beneficios a los usuarios, sino también a los productores de contenido. Neil Hunt explicó que, de hecho, Netflix es la plataforma ideal para los programas pequeños.
“Algunos los llamarían basura”, dijo, “pero hay muchos shows con audiencias pequeñas pero devotas”.
Esto no sería posible en la televisión convencional, pues pocas compañías comprarían publicidad para los cortes de estas series, mientras que “la televisión por Internet puede permitirse publicarlos”.
Además, las recomendaciones personalizadas se asegurarían de que el contenido llegara a quien le puede interesar, sin hacer distinciones de presupuesto o cantidad de espectadores.
Por otro lado, el sistema de televisión a la carta ofrece a los directores la posibilidad de experimentar con distintos formatos, ya que no tienen que adherirse a una duración específica y la audiencia puede elegir cuántos episodios ver de una sola “sentada”.
“Las historias que vemos hoy no son como las que veían nuestros padres. Y las historias que tus hijos vean en el 2025 te dejarán sorprendido”, afirmó Hunt.
Y es que como respuesta a la pregunta de uno de los miembros de la audiencia de su conferencia, Neil Hunt admitió que Netflix tiene los ojos puestos en la transmisión de eventos deportivos en vivo, pero como estos suelen ser ganados por el mejor postor, la empresa no tiene una ventaja sobre los demás competidores.