La película “¡Qué viva México”, de Luis Estrada, critica la división de clases sociales que se vive actualmente en el país
El director Luis Estrada regresa con ¡Qué viva México!, cinta en la que retrata la idiosincrasia del mexicano y el momento político que se vive en el país. El actor Cuauhtli Jiménez, quien interpreta a ‘Jacinta’, asegura que se trata sobre la polarización y la lucha entre clases sociales
Karina Corona¿Qué significa ser mexicano en la actualidad y cómo hacer esa representación? Luis Estrada, quien tras casi ocho años de ausencia, regresa con ¡Qué viva México!, cinta que ha causado mucha controversia, desde el retraso para su estreno, el cual estaba planeado sería en 2022, hasta la demanda del director contra IMCINE por, supuestamente, bloquear el financiamiento como un intento de censura.
Pese a todas estas polémicas, la película llegará el 23 de marzo a tres mil salas de cine, cifra con la que esperan sea el estreno más taquillero del cine nacional.
Luis Estrada ha declarado en diversas ocasiones que es su proyecto más ambicioso en términos creativos, donde “pretende hacer un retrato muy descarnado y divertido de lo que es mi visión del país en el que estamos viviendo que, gracias a la intolerancia, nos está llevando a lugares donde no deberíamos de ir”.
El actor Cuauhtli Jiménez, quien dará vida a “Jacinta”, comparte a Reporte Índigo que se trata de un proyecto que, sin duda, generará muchas discusiones.
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“Es una reflexión sobre la polarización, por eso el lema de ‘quien no está conmigo, está contra mí’, que es el pan de cada día en la sociedad actual. Sobre la intolerancia y la capacidad que hemos perdido en los últimos años de debatir sin tratar de aniquilarnos”, destaca el actor.
“Luis Estrada es un director de los cuales hay muy pocos en México, que logra tener éxito en la taquilla y en la crítica por su visión tan aguda”
Llamada también por el elenco como “la lotería incorrecta”, la película retrata la idiosincrasia del mexicano al hacer una crítica sobre la familia, la religión y el poder político.
“Todos se dan contra todos para ilustrar los diferentes conflictos que hay en la sociedad. A Poncho Herrera le llaman ‘El Fifí’, a Mayra Hermosillo ‘La Buchona’, y a mí ‘La Vestida’, todo eso es una pista de los conflictos de la historia”, abunda Jiménez.
La comedia y la sátira son las herramientas que el director de La ley de Herodes (1999) ha utilizado para criticar a la sociedad mexicana y esta no es la excepción.
Desde la figura del “pobre flojo y mantenido”, “los ricos engreídos y avaros”, hasta la figura del mariachi tocando “El mariachi loco” cada que se representa una “situación chusca”.
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“Como sociedad nos encanta reírnos. Yo pienso que se va a recibir bien, pero sabemos que es una apuesta arriesgada y atrevida de Estrada, él la ha llamado como su película más ambiciosa y dentro de eso, existen varios riesgos, al hablar desde los estereotipos, al hacer una crítica tan ácida de toda la sociedad mexicana, pero el discurso está muy articulado.
Al final de cuentas todos nos vamos a ver reflejados ahí, vamos a reconocer a alguien de nuestra familia, si no en todos los personajes, por lo menos, en tres de ellos seguro”, asegura Cuauhtli.
¡Qué viva México! se rodó en la segunda mitad de 2021, en distintas locaciones de San Luis Potosí; entre ellas, la población minera Real de Catorce
La construcción del personaje
Al enterarse de la muerte de su abuelo minero, Pancho Reyes (Alfonso Herrera) viaja con su familia al pueblo de “La Prosperidad”, donde se reencuentra con sus parientes y se desata el caos por la herencia.
“Jacinta es parte de los hermanos Reyes, quienes van a estar peleando con Pancho por la herencia del abuelo. Desde Finlandia me alejé de lo que normalmente venía haciendo, que eran villanos en televisión, casi siempre como la parte ruda, por eso disfruté trabajar un personaje muy femenino”, explica el actor.
En ¡Qué viva México! su personaje representa a la comunidad trans, de la cual, considera, se debe hablar más desde el respeto.
“Construí al personaje con Luis y Fermín Martínez, quien interpreta a Lupe, mi pareja en la historia. Había que entender cuál era el tono de la historia, que es una sátira política muy ácida y negra. Para mí era importante conseguirlo con un personaje que usa el sentido del humor para ponerse por encima de situaciones que le puedan significar desprecio, discriminación y violencia”, comenta.
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¡Qué viva México! se estrenará el próximo 23 de marzo en más de tres mil salas de cine
La lucha contra el racismo
Aunque Cuauhtli Jiménez ya no pertenece desde hace poco más de un año a Poder Prieto, platica que desde su trinchera sigue interesado en la discusión y la lucha, pues, el racismo, al igual que el machismo y el clasismo son temas que imperan en México y en la industria del cine.
“La película también ilustra la guerra de clases sociales, los fifís contra el pueblo, entonces, más allá de decir qué bando está bien o mal, lo que nos ilustra Luis es decir que ser enemigos del otro nos lleva a destruirnos; lo que necesitamos son encontrar puntos de encuentro, a pesar de las diferencias”, sostiene el actor.
Al plantear sobre la posibilidad de que existiera un “mundo utópico” sin discriminación, misoginia y clasismo, el actor opina que eso es imposible.
“La misma existencia del ser humano implica la maldad, el conflicto y el problema, por supuesto que eso no debe de quitar la aspiración de combatir estos males, ¿no? Mientras más los combatamos, podremos equilibrar, aunque un poco, las cosas. Seguramente si alguno se resuelve surgirán otros problemas, las utopías no existen, pero creo que sí debemos apelar a la convivencia pacífica”, afirma.
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A lo largo de sus 17 años de trayectoria, el actor confiesa que cumplió un sueño al filmar junto a Luis Estrada y con un gran elenco conformado por Damián Alcázar o Ana de la Reguera. Además, aprendió a trabajar con la comedia sobre temas que puedan causar dolor, pues afirma, que “el sentido del humor es una gran arma de supervivencia en la vida”.
“No estoy tan de acuerdo en hacer cine con un objetivo aleccionador o educativo, me causa cierto escozor, a lo que sí tiene que aspirar es a provocar preguntas y reflexiones”
“Es una carrera en la que estás expuesto al rechazo, en la que tienes que estar buscando los proyectos, generando y debatiendo ideas. Me ha hecho madurar y crecer mucho como persona para entender muchas cosas de mí y del mundo, eso lo agradezco siempre. No creo que dedicándome a alguna otra profesión hubiera sucedido lo mismo”, concluye Cuauhtli Jiménez.
Su trabajo desde el teatro
En mayo de este año, el actor Cuauhtli Jiménez estará en una obra de teatro original, lo cual lo tiene muy emocionado, pues considera que los procesos de la dramaturgia son de mucho aprendizaje.
“El cine y la televisión no tienen el rigor, la disciplina ni el tiempo de preparación que sí, para mí es la gran escuela del actor y por eso me encanta hacerlo y me parece muy importante ver y hacer teatro y haciendo teatro, es una manera de pulir las herramientas profesionales”, opina.
