Muy pocos saben que la banda argentina Soda Stereo guarda una historia muy peculiar pues durante una noche tocó un concierto en unos XV años celebrados en el municipio de Ecatepec, del Estado de México.
Lo anterior como parte de una gira, la cual cerraron con broche de oro al interior de una panadería en San Cristóbal, Ecatepec de Morelos, el 1 de octubre de 1992, cuando también habían lanzado su sexto álbum de estudio, Dynamo, título que, además, dio nombre a la gira que el grupo argentino realizó el 21 de noviembre de 1992 y que culminó el 28 de marzo de 1993.
Soda Stereo.
Gira “Dynamo”.
Ecatepec, Estado de México.
Marzo de 1993. pic.twitter.com/eW4caZ7o04— Soda Stereo MX (@SodaStereo_Mx) March 30, 2020
La banda realizó un recorrido por Argentina, Chile, Paraguay, Venezuela y México, éste último en el que cerraron con un concierto en una panadería del Edomex en la cual interpretaron varios de sus temas.
Lo anterior fue corroborado por Wady Rodríguez, un reconocido iluminador que formó parte del staff de la banda durante esos años y quien dio una entrevista a Teleshow, de Infobae, en la que narró cómo Soda Stereo y el personal que formó parte de la gira Dynamo acabaron en San Cristóbal.
De acuerdo con Wady Rodríguez, el cierre del tour se llevaría a cabo el 20 marzo de 1993 en Tampico, México, “pero se agregó una fecha que sin duda fue el mejor final que podía tener esa gira. Al menos para mí. La fecha fue el 28 de marzo de 1993 y el lugar un tanto particular: la panadería ´El Ángel´, de la ciudad de San Cristóbal de Ecatepec, México”.
“Literalmente no lo podíamos creer. Pensamos que el chofer se había equivocado de dirección o que nos estaba haciendo una joda. Imagínate que de pronto estaciona el micro frente a la panadería, abre la puerta y dice: Llegamos”, agregó el iluminador.
Curiosamente, Wady Rodríguez detalló que cuando comenzaron a bajar el equipo para poder armar lo necesario para el show, tuvieron que entrar a la panadería, pasar entre la gente que estaba comprando su pan, así como entre los empleados.
Y es que la panadería conectaba con la casa del dueño y quien había pagado por el concierto, de ahí llegaron a un jardín. Wady rememora que el dueño los recibió de la manera más cálida posible, además, claro, de con mucha emoción.
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“Nos mostró un escenario que con mucha voluntad habían preparado pero que estaba lejos de cumplir con las necesidades de la gira. Habían armado una especie de carpa de lona naranja de la cual obviamente no se podía colgar nada”, expresó.
Asimismo, el iluminador añadió que las habitaciones de la casa terminaron convirtiéndose en sus camerinos y el motivo del concierto era porque se trataba de los 15 años de la hija del hombre que los contrató por lo que se trató de algo más privado.
“Los que tuvieron la suerte de estar aquel día en la panadería ´El Ángel´ dudo que se lo olviden de esa experiencia”, afirmó Wady.
