La masturbación ha estado rodeada de mitos y malentendidos a lo largo de la historia. La sexóloga Claudia Lobatón ofrece una visión esclarecedora, desmintiendo estas ideas arraigadas y destacando su impacto positivo en la salud sexual y el bienestar psicológico
Lobatón destaca que la masturbación es una conducta sexual saludable. Permite conocer el propio cuerpo, experimentar placer y mantener el bienestar emocional. Esta práctica, ya sea individual o compartida, es esencial para el autoconocimiento y la satisfacción sexual.
“Durante siglos, la culpa y la vergüenza han envuelto la práctica de la masturbación, condenándola como un acto exclusivo de placer no reproductivo. Esta condena ha generado angustia en un considerable porcentaje de la población mexicana, alcanzando entre el 30 y el 36 por ciento de las personas”, comenta Lobatón.
La falta de información adecuada desde edades tempranas, señala la experta, contribuye a la perpetuación de estos mitos, los cuales pueden manifestarse en miedos e inseguridades que impactan negativamente los encuentros sexuales, como la anorgasmia o la eyaculación precoz.
“Entre el 30 y 36 por ciento de mexicanas y mexicanos alguna vez han sentido angustia al masturbarse. Al crecer con educación de la sexualidad basada en lo oculto porque da pena, con información de amigos, los mitos se transforman en miedos e inseguridades que nos impiden disfrutar y que pueden terminar en dificultades en nuestros encuentros sexuales como anorgasmia (incapacidad de llegar al orgasmo) o eyaculación precoz”, precisa.
Por lo tanto, la sexóloga informa que tener educación sexual desde temprana edad contribuye al aumento de la empatía, el respeto por los demás o la mejora de la comunicación, la autoimagen positiva (incluida la imagen corporal).
Sus beneficios
Los beneficios fisiológicos y psicológicos de la masturbación son ampliamente respaldados por la investigación. Estudios han demostrado que la masturbación puede mejorar el estado de ánimo, reducir el estrés y mejorar la calidad del sueño. Además, fomenta el autoconocimiento y la autoestima sexual.
A pesar de estos beneficios, la educación sexual sigue siendo insuficiente en muchos contextos. Lobatón aboga por una educación sexual integral que incluya información precisa y libre de prejuicios sobre la masturbación y otras prácticas sexuales. Solo así se podrán derribar los mitos y promover una actitud más saludable hacia la sexualidad.
“Según apuntan los estudios, la masturbación conlleva un aumento en los niveles de dopamina y oxitocina, lo que lleva a mejorar el humor, rebajar el cortisol y reducir el estrés. ‘Yo lo hago en la ducha, me ayuda a relajarme’, nos dicen muy seguido. Que te quedes dormido después de masturbarte no es casualidad.
“Los orgasmos logrados a través de la masturbación se asociaron con la percepción de una mejor calidad del sueño. Como también apuntan los estudios, el aumento de niveles de dopamina favorece la capacidad de foco y concentración. O hasta para el 48 por ciento de las personas, el sexo y la masturbación pueden ayudar a reducir las migrañas y cefaleas”, explica.
Actualmente, la formación de profesionales de la salud sigue siendo bastante medicalizada, dejando de lado los temas relacionados al disfrute. La medicina sigue actuando como una guía moral sobre lo que es normal o permitido en sexualidad.
“Si crecemos con la idea de que disfrutar es sucio o está mal, crecemos con vergüenza sobre nosotros mismos, y es más fácil descuidarnos porque nos rechazamos”, aclara la especialista y sexóloga de Platanomelón, proyecto que promociona una educación sexual abierta y sin tabues.
Relación entre la masturbación y el desempeño sexual
La falta de autoconocimiento genera dificultades para decir lo que te gusta lo cual genera mayor preocupación sobre el rendimiento sexual.
“Más allá de los beneficios, la práctica de la masturbación permite conocer tu propio placer, de esta manera le puedes pedir a tu pareja lo que te gusta. la masturbación amplía el repertorio sexual y las fantasías eróticas, además facilita la excitación y el orgasmo”, explica Claudia Lobatón.
Las masturbación ayuda a:
- Aumentar los niveles de dopamina y oxitocina, lo que lleva a mejorar el humor, rebajar el cortisol y reducir el estrés.
- Favorece la capacidad de foco y concentración.
- Pueden ayudar a reducir las migrañas y cefaleas.
La masturbación y las relaciones de pareja
- Permite conocer tu propio placer, de esta manera le puedes pedir a tu pareja lo que te gusta.
- Amplía el repertorio sexual y las fantasías eróticas.
- Facilita la excitación y el orgasmo.
¿Cómo influye el uso de juguetes sexuales en la masturbación?
- Su uso se ha asociado a un incremento de deseo, excitación, lubricación, orgasmo.
- También se asoció con una mayor apertura en los pensamientos y actitudes de las mujeres sobre las actividades sexuales en general y sobre sí mismas.
- Están positivamente correlacionados con el aumento del deseo sexual y la función sexual en general.
- Ayudan a romper con la rutina y así dar chispa a nuestras relaciones.
Tabla Adiós a los mitos
MITO: La masturbación es cosa de solteras y solteros
¡En absoluto! Las personas en pareja también pueden (e incluso es recomendable) tener espacios para explorar el auto placer de forma independiente, como tantas otras prácticas que pueden hacerse a solas o en pareja. Por otro lado, masturbarse en pareja también es una buena opción. Pueden probar, tanto masturbarse mutuamente, como ir cada uno a los suyo y compartir un ratito de auto placer.
MITO: La masturbación es adictiva
No, al igual que tampoco lo son muchas otras prácticas como comer, hacer deporte o pasear a tu perro. Puedes masturbarte, incluso mucho, sin que esto implique que desarrolles una adicción. Las alarmas deben saltar cuando la masturbación (o cualquier otra actividad) perjudica la calidad de tu vida, restándole tiempo a otras esferas, como el trabajo, las amistades y la realización personal.
MITO: No tener ganas de masturbarse es un problema
Es frecuente pensar que, por tener pene, tienes que masturbarte con mucha frecuencia, pero, no nos cansaremos de decirlo, cada persona es diversa y sobre gustos, no hay nada escrito. Las veces que te masturbes no son objetivamente un problema, solo lo es en la medida en que ello te genera malestar.