La insurrección desde los cómics
El ilustrador estadounidense Peter Kuper lleva años haciendo sátira de los gobiernos de su país desde la trinchera del dibujo, y ahora bajo el mando de Donald Trump sigue expresando sus ideas contestatarias con la tinta y el papel
Hidalgo NeiraComo marco periférico del Hay Festival de Querétaro, en las aulas universitarias también se acerca el encuentro de escritores a los estudiantes con la vertiente Hay Joven, en donde distintos autores van hasta los salones de clases y platican con los alumnos de su experiencia dentro del mundo literario.
En el caso de Peter Kuper, estuvo en el Aula Magna del Tec Milenio del campus de Querétaro, donde ante un grupo de casi 50 adolescentes platicó de sus inicios como ilustrador y como es que a él le inspiró un asunto bélico para dibujar crítica social, además del humor irónico de Charlie Chaplin así como mundos postapocalípticos como el de Mad Max.
Kuper es cofundador de la revista World War 3 Illustrated la cual es crítica del gobierno estadounidense y se le considera de izquierda, en ella el artista ha expresado sus ideas anticapitalistas y que van en contra de los gobiernos presidenciales como el de Ronald Reagan, George W. Bush entre otros.
Del actual mandatario de la Casa Blanca indica que él teme de su administración por las represalias que pudieran venir a futuro en los medios que el considera falsos y si es que eso le pudiera costar su trabajo.
“Le tengo miedo todos los días, hubo un ataque a un periódico y Trump dijo que ellos eran los enemigos del pueblo, así que está desarrollando un ambiente en el que podría parecerse a Charlie Hebdo pero en los Estados Unidos”, explica Kuper.
Respecto a como es que en otras partes del mundo se hace sátira política desde el comic, el indica que ahora mismo el humor está entrando en un punto donde se discute lo políticamente correcto.
“El nivel de sensibilidad está llegando a un lugar en el que es difícil saber qué es lo que está bien y lo que está mal, si hago un dibujo de un afroamericano tendría que ser muy cuidadoso y ver qué es demasiado y no quiero hacerlo por ser blanco”, dice el autor.