El trabajo periodístico de las reporteras Jodi Kantor y Megan Twohey hizo que las mujeres en el mundo alzaran la voz en contra de la violencia que sufrían.
Cuando en octubre de 2017 se reveló que durante décadas el productor de cine Harvey Weinstein había abusado sexualmente de decenas de mujeres de la industria fílmica comenzó el escándalo que daría lugar a una lluvia de acusaciones de más mujeres a nivel mundial que también habían vivido en distintos ámbitos; así nació el movimiento #MeToo.
Sin embargo, el origen y cómo es que se destapó esta historia de corrupción, chantaje y mentiras es una arista de la que poco se sabe; sin embargo, ahora a más de 5 años de distancia se puede escudriñar en la película Ella dijo, la cual se estrenará en México el 5 de enero.
The New York Times, primero, investigó a Donald Trump durante su contienda presidencial en 2016 en torno a comentarios misóginos que realizó en conversaciones privadas y, después, se hicieron públicos más de 25 casos de acoso sexual del magnate.
Esto abrió la posibilidad para que las reporteras Jodi Kantor y Megan Twohey comenzaran a recibir otro tipo de pistas y dieron con un hombre siniestro: Weinstein.
El problema era el mismo con cada mujer que hablaban, ninguna quería declarar públicamente por miedo a las represalias, porque en el pasado ya habían intentado denunciar y él siempre veía la manera de frenar los reportajes.
Después de meses de indagar, perseguir evidencia y hablar con fuentes privadas, las reporteras lograron convencer a sus editores. La historia era sólida y se hizo pública, al mismo tiempo que más medios sacaban sus propias averiguaciones y reportajes de investigación alrededor de Weinstein.
“La investigación de Jodi y Megan fue un momento decisivo, no sólo para la industria del cine sino para toda la cultura, que se sintió como una que exigía ser contada en una película. Se sintió como un momento único en una generación de considerar un problema que ha afectado y continúa afectando las vidas de millones de mujeres y hombres, y nos sentimos honrados de que Jodi y Megan confiaran en nosotros para contar esta historia en la pantalla”, describe Dede Gardner, productora de Ella dijo.
El largometraje se llevó a cabo durante el cerco sanitario, contando con un equipo técnico encabezado por mujeres, el libro homónimo, así como la investigación completa del Times hecha por Twohey y Kantor fue llevada a guion por Rebecca Lenkiewicz y la directora Maria Schrader tomó las riendas del proyecto.
“Nuestro principal objetivo era encontrar a las mejores personas para hacer esta película. Esta historia trata sobre mujeres que se ponen de pie, hablan y reclaman su poder, y se sintió bien que las mujeres lideraran el esfuerzo para llevarla a la pantalla. Dicho esto, estoy ansiosa por que llegue el día en que un equipo liderado por mujeres no tenga nada de especial”, argumenta Schrader.
Veracidad a cuadro en la historia de Ella dijo
Al realizarse el filme durante el confinamiento de 2021, las realizadoras aprovecharon y tomaron la redacción del periódico para, precisamente, rodar la mayor parte de secuencias en el edificio donde ocurrió la acción editorial, lo que le da un toque de mayor veracidad a la película.
“Uno de los raros aspectos positivos de la pandemia fue que el Times retrasó su regreso al trabajo. Vimos una oportunidad para filmar posiblemente en el edificio real y lo convertimos en una prioridad para que eso sucediera”, comenta Gardner en las notas de producción del filme.
Algo que también era de suma importancia para todas era no mostrar secuencias de violencia o de abuso a cuadro, para evitar el revictimizar a las mujeres, todo gira en torno a la investigación y cómo es que se recabaron los hechos que ya habían pasado durante años.
“No estoy interesada en agregar otra escena de violación al mundo. Hemos tenido suficiente de eso. Nuestro material de origen aquí fue el libro y las vidas de las reporteras. Sus perspectivas y experiencias y el testimonio de aquellas con quienes hablaron fueron nuestras guías. Weinstein apenas aparece en la pantalla, pero su presencia ciertamente se siente, y sus acciones guían gran parte de la película. Me imagino que así fue para Jodi y Megan mientras informaban. Tampoco tenían mucho contacto con Weinstein”, abunda la directora.