La FIL del Palacio Minería necesita más público y ventas para sobrevivir

La Feria Internacional del Libro (FIL) del Palacio de Minería celebrará su edición 45 del 22 de febrero al  4 de marzo, teniendo como invitado de honor a Sinaloa, desgraciadamente llega en números rojos, ya que las ediciones anteriores han estado marcadas por la polémica, las bajas ventas y los altos costos por participar en ella.

“Estamos en números rojos, hemos necesitado apoyo que hemos conseguido e igual que en los primeros 20 años, la Facultad de Ingeniería de la UNAM es la que financia a la Feria para seguir, pero fueron mucho menos que el año pasado, ahorita no me sé la cantidad, pero vamos por buen camino”, afirma Fernando Macotela, director de la FIL del Palacio de Minería.

Al finalizar la presentación del programa, el licenciado recordó que en la edición 44 tuvieron una reducción de público del 33 por ciento; además de que fue la salida del Fondo de Cultura Económica (FCE). Este año, afirma, vendieron más estand, menos stands que en sus buenos tiempos, pero muchos más que el año pasado.

“Sabemos que somos una de las ferias más caras, nuestro metro cuadrado es de los más caros del país (11 mil 250 pesos por metro cuadrado) La FIL Guadalajara (4 mil 200 pesos por metro cuadrado) tiene 45 mil metros cuadrados, nosotros solo cinco mil y muy buenas ventas, pero hemos estado reflexionando desde muchos puntos de vista.

“Guadalajara dura nueve días, nosotros 12, hay que sacar alguna conclusión y todo este año estuvimos pensando en eso, pero no eran medidas que pudiéramos aplicar para esta Feria, era muy pronto, pero después veremos qué es lo que procede”, expresó el director.

Otra de las grandes ausentes será la Editorial Planeta, una de las más grandes de Hispanoamérica. Su motivo, según Macotela, fue la falta de dinero. La editorial utilizaba 60 metros que ahora serán ocupados por el Libro Club de la Ciudad de México que no se dedica a vender libros, sino a fomentar la lectura.

“Hasta eso, nosotros no tenemos problema, porque no tenemos tanto espacio y si se desocupa un lugar, que además es bueno, inmediatamente hay quien aspira a tomarlo, pero hemos estado reflexionando mucho en todas esas cosas”, reiteró Macotela, quien también indicó que el lugar que dejó el FCE fue ocupado por la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).

Lo que afecta a la FIL del Palacio de Minería

De acuerdo con Fernando Macotela las causas que mantienen a esta Feria en números rojos es que se compran menos stands y viene menos gente, para él esto se debe a la pandemia.

“El año pasado la pandemia no acababa de pasar y este año yo diría que tampoco. Estamos muy conscientes de eso, hay mucha gente que no se atreve. La Feria tiene un gran público de la tercera edad, que al final somos el grupo más vulnerable”, considera.

Otro factor importante, comenta, es que han surgido muchas otras ferias tanto en la Ciudad de México como al interior de la República Mexicana. Explica que cada alcaldía prácticamente tiene la suya y todos los estados igual.

“Hemos sido tan buen ejemplo, somos la más antigua del país, que han brotado ferias de todos lados, prácticamente cada alcaldía de la Ciudad de México tiene su feria, muchísimos estados tienen ferias importantes, como Hidalgo y Yucatán”, señala.

Sobre el tendido de libros que realizó el año pasado el FCE en el Palacio Postal en las mismas fechas que la FIL del Palacio de Minería, Fernando afirma que no les afectó, más bien las pérdidas las sufrió la editorial encabezada por Paco Ignacio Taibo II.

“Nosotros lanzamos la convocatoria, el FCE no se volvió a inscribir. Su tendido impactó en las ventas de ellos, porque estuvieron ahí solos y lógicamente tenían menos gente. Nosotros tenemos un aproximado de cuánto vendían y quedaron muy por debajo.

“Además se ponen ahí, por qué no se ponen ahorita o en mayo, se ponen ahí porque saben que la gente viene a esta Feria, los que hacen la promoción somos nosotros, la UNAM, nosotros somos la UNAM”, aseguró.

El año pasado recibieron cerca de 70 mil visitantes, un 33 por ciento menos que antes de la pandemia, por lo que ahora si bien no buscan llegar a esa meta sí esperan superar la cifra del año pasado.