La extraordinaria Sra. Clooney
Ver una entrevista a Amal Alamuddin es inspirador. La abogada y activista responde a preguntas sobre temas complejos con facilidad y confianza, conservando la seriedad pero sin parecer inalcanzable.
Ayuda, es inútil negarlo, que tenga unos ojos de una oscuridad profunda que combinan con su cabello. Pero aunque Amal se ajusta al estándar de belleza que George Clooney aplicó para sus relaciones anteriores, es evidente lo que aporta a la relación que hizo que el soltero más notorio del mundo se decidiera a casarse.
Ana Paulina ValenciaVer una entrevista a Amal Alamuddin es inspirador. La abogada y activista responde a preguntas sobre temas complejos con facilidad y confianza, conservando la seriedad pero sin parecer inalcanzable.
Ayuda, es inútil negarlo, que tenga unos ojos de una oscuridad profunda que combinan con su cabello. Pero aunque Amal se ajusta al estándar de belleza que George Clooney aplicó para sus relaciones anteriores, es evidente lo que aporta a la relación que hizo que el soltero más notorio del mundo se decidiera a casarse.
Amal Alamuddin nació en Beirut, Líbano, en 1978, pero vive en el Reino Unido desde que su familia escapó de su país natal en medio de la guerra civil.
Estudió en la Universidad de Oxford, y en el 2000 se graduó de la Licenciatura en Derecho. El año siguiente comenzó la maestría en la Escuela de Leyes de la New York University, de la que se graduó poco después. Y aunque destacó durante sus estudios, su carrera es su logro más brillante.
La comenzó en Sullivan & Cromwell, la tercera firma de abogados más prestigiosa del mundo, en la que Amal pasó tres años como parte del equipo de Defensa Criminal e Investigaciones.
Después, Amal hizo su transición al Derecho Internacional, al que se ha apegado desde entonces, trabajando en la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en el Tribunal Especial de Líbano y el Tribunal Criminal Internacional de Yugoslavia.
En el 2010 regresó a Londres, donde desde entonces ocupa el puesto de barrister (o abogado litigante).
Su trabajo ha tenido efectos en todo el mundo. Quizá sus casos más notorios fueron en la defensa de Julian Assange, fundador de WikiLeaks, y Yulia Tymoshenko, primera ministra ucraniana arrestada en el 2011 y liberada en febrero de este año.
En el 2013, Amal fue parte de varias comisiones de la ONU, consejera de Kofi Annan durante su envío a Siria, y Asesora del 2013 Drone Inquiry, investigación sobre el uso de drones en operaciones contra el terrorismo.
Comenzó a salir con Clooney ese mismo año, y se comprometieron en abril de este año. Pero la abogada no detuvo su labor.
Días después del anuncio de su compromiso, Amal se reunió con el entonces Ministro de Asuntos Exteriores, William Hague, para la planeación de la Cumbre Global para acabar con la Violencia Sexual durante Conflictos, en la que Angelina Jolie dio un discurso.
El mes pasado fue seleccionada para una comisión especial –de tres personas– creada por la ONU para investigar violaciones a las leyes de la guerra en la franja de Gaza. Pero rechazó la posición.
“Estoy horrorizada por la situación en la ocupada Franja de Gaza, particularmente por las pérdidas de civiles que se han causado, y creo firmemente que debe haber una investigación independiente y transparencia por los crímenes que se han cometido”, afirmó.
Lo que muchos se preguntan es qué vio ella en el ganador del Oscar. Y la respuesta podría estar en la actividad política de George Clooney, que comenzó en el 2006 con su activismo por la resolución del conflicto en Darfur, y continuó con trabajo para ayudar a las víctimas del terremoto en Haití en el 2010, su participación en “Not on our watch” –iniciativa que busca prevenir masacres masivas en todo el mundo– y varias otras causas.