Durante los años 90 del siglo XX, un grupo de artistas pugnó por la creación de un espacio que propiciara el encuentro, la discusión y la exhibición de la fotografía. El entonces Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), hoy Secretaría de Cultura federal, acogió esta idea para crear el Centro de la Imagen.
A partir de su apertura, el 4 de mayo de 1994, el recinto ha sido un referente en la exhibición, preservación, investigación, formación y divulgación de la fotografía y la imagen, aspectos que durante la pandemia, invariablemente, se tuvieron que replantear para ajustarse a las demandas de la actualidad, incursionando así en la digitalidad.
“Todas las instituciones tuvimos que migrar de la nada a lo digital, muchos sin estar preparados o sin la infraestructura, pero yo rescato que al Centro de la Imagen le permitió ampliar su presencia fuera de la Ciudad de México, sin duda, eso es algo que se ganó y que no podemos soltar”, indica Johan Trujillo, directora del espacio cultural.
Compromiso con una oferta nacional
Una de las grandes deudas del Centro de la Imagen, considera Trujillo, era crear una propuesta para los estados de la república, pues mucha de la oferta se limitaba al espacio físico y alrededores. Por ello, gran parte de 2020 y 2021, su visión fue mirar más allá de lo presencial y ofrecer contenido a todo México, incluso, a nivel internacional.
Al no estar preparados al inicio de la pandemia, como indica Johan, fue un gran reto dar ese paso hacia la virtualidad; sin embargo, hoy es una de las grandes satisfacciones del recinto.
“Estábamos muy limitados a la parte física; le entramos al Zoom picándole y experimentando, tuvimos que aprender con personas que tienen conocimiento en streaming. Nos hemos fortalecido en medida de las posibilidades y tenemos mucho trabajo que hacer en el sitio Web, más por limitaciones tecnológicas e infraestructuras ajenas al propio centro”, abunda.
Y aunque el cambio fue lento, el Centro de la Imagen cuenta con una vasta línea de contenidos digitales. Actualmente todas sus publicaciones se encuentran en la plataforma, mismas que se pueden descargar gratuitamente.
“Lo que pasó es que teníamos que hacer lo mismo que se hacía en presencial, pero ahora vía streaming y es evidente que la gente no puede estar más de una hora en pantalla. El reto es aprender en la especificidad de lo digital”, relata.
Durante 2020 realizaron “experimentos” con proyectos digitales, organizando eventos en multiplataformas, además de explotar el uso de los hipervínculos y la hipertextualidad, con el fin de explorar y entender cuáles son las posibilidades de lo digital.
Sin embargo, aquí deriva el futuro del recinto, saber aprovechar las oportunidades de la virtualidad y que estas perduren en el futuro. Esto se ha implementado con las exhibiciones que se inauguraron el segundo semestre de 2021, como la XIX Bienal de Fotografía 2021 y Autorretrato con consciencia. Mujeres, género y feminismo, mismas que ya se pueden apreciar en las plataformas digitales o, se podrán visitar de manera presencial hasta mayo de 2022.
“La pregunta es pensar en contenidos para aprovechar lo digital en las salas de exhibición, pensar de otra forma los programas formativos para que no estén limitados a la plataforma de Zoom, sino en la posibilidad que tiene Internet, de compartir la conectividad más allá de la cuestión geográfica. El riesgo es que ya hay más competencia, competimos no sólo con lo que pasa en la Ciudad de México, sino en todo el país y el mundo”, apunta.
Si antes el reto era atraer la mirada sobre las posibilidades de esparcimiento de cultura y entretenimiento de la ciudad, ahora se vuelve mundial e “interesante”.
“Tiene que ver con pensar y valorar contenidos significativos para las personas sobre los distintos ejes de una institución, que tiene que ver con difundir, propiciar la reflexión, valorar la historia y la memoria; creo va por ahí”, indica.
Una mirada al futuro en Centro de la Imagen
“En junio de 2021 pudimos abrir nuestro primer bloque de exposiciones y se quedó abierto todo este tiempo, el proceso ha sido lento, el que las personas quieran visitar los museos, pero va mejorando”, comparte Johan Trujillo, directora del espacio cultural.
Durante el primer semestre tuvieron poco más de tres mil 500 personas, los cuales, precisa, no fueron sus mejores números. Incluso, son mucho menores que en 2019, pero considerando que en 2020 llegaron a poco más de mil visitantes, Johan recalca que, en general, les fue bastante bien en 2021. Esto responde a que las personas tienen más ganas de salir y que ya hay una mayor seguridad sanitaria en los museos.
La directora del recinto aclara que al ser una dependencia de la Secretaría de Cultura federal, durante los últimos meses no padecieron una afectación económica. Y, aunque hubo un ligero recorte, su presupuesto es suficiente para mantener el funcionamiento del Centro de la Imagen.
No obstante, uno de sus objetivos fue apoyar a la comunidad artística, esto se vio reflejado en la convocatoria de la XIX Bienal de Fotografía, donde, además de los dos premios que históricamente se han dado en el certamen, se otorgaron 25 más, los cuales consistieron en un apoyo de 10 mil pesos para la producción de la obra.
“A nivel personal el reto ha sido cómo mantener la organización de un equipo de trabajo a distancia, el año pasado fue muy complejo en Zoom, se generó un mal uso del correo electrónico y del WhatsApp, pero hemos encontrado mecanismos de seguimiento para que esté todo más organizado.
“Para mí, el aprendizaje era evidente, pero para muchas instituciones su modelo laboral responde a lógicas del pasado, no tienes que estar ocho horas sentado en una oficina, la lógica tiene que estar basada en resultados y metas claras. Eso es un gran acierto sobre todo porque te permite mayor libertad y reconocer las habilidades y talentos de las personas que trabajan”, especifica.
Exposiciones para 2022
Para mayo de 2022 se presentará la muestra a propósito del 20 aniversario luctuoso de la fotógrafa Mariana Yampolsky, misma con la que se celebrarán los 28 años del Centro de la Imagen.
“Es una investigación de Eugenia Macías que busca hacer una revisión de la obra de Mariana más allá de su parte fotográfica, nos interesa dar estas otras aristas, y otras formas de aproximarnos a su obra”, abunda Johan.
En enero de 2022 se presentará Yo en 2020, 2020 en mí, se trata de autorretratos sobre los sentimientos y vivencias de las personas durante este año.