La editorial Siglo XXI México llegó a un acuerdo para adquirir Siglo XXI España. Desde 1998, la filial europea se alejó de su casa matriz y, en 2010, los accionistas vendieron su participación a la editorial Akal. Finalmente, las tres casas (Argentina, España y México) volverán a trabajar juntas.
Este suceso histórico se suma a la transformación que ha estado viviendo la editorial fundada en 1965 por Arnaldo Orfila Reynal al ser adquirida hace dos años por Hugo Sigman y Silvia Gold, empresarios con gran trayectoria en el mundo de la cultura internacional.
“Claramente vivimos un momento de renovación histórica de una editorial que está por cumplir 60 años y está entrando en una nueva etapa; el mundo editorial cambió mucho, en los últimos 30 años ha habido unos cambios muy profundos en la industria y me parece que lo que estamos haciendo es preparar a Siglo XXI para poder enfrentar esta nueva etapa con más músculo”, afirma, desde Argentina, Carlos Díaz, director general de la editorial.
Súmate a la entrevista en @PMovimiento, de @RadioUNAM, con Carlos Díaz, director general de Siglo XXI, y Paola Morán (@pmoranl), directora editorial. https://t.co/PoHHRYw5dB
— Siglo XXI Editores (@sigloxximex) July 3, 2023
Si bien la filial española no pertenecía a la misma empresa que la argentina y la casa matriz, sí compartían el mismo catálogo, por lo que lo mejor del catálogo de Siglo XXI España ya está publicado por México, como los libros de Perry Anderson, lo que empieza ahora es una etapa en donde se podrá pensar en una política no sólo para América Latina, sino para todo el mundo de habla hispana; es decir, tener una proyección más ambiciosa.
La editorial Siglo XXI fue inaugurada el 18 de noviembre de 1965 por Arnaldo Orfila
“Es importante que una editorial tenga una buena red de comercialización, tanto a nivel nacional como en el exterior, entonces, estamos trabajando mucho en unificar, por ejemplo, distribuidores en toda América Latina, México será el representante de Siglo Argentina y España, en Argentina haremos lo mismo y en España también. No son cosas muy glamurosas, pero bueno, nosotros vivimos de vender libros”, explica Díaz.
Además de afianzar toda su red comercial, también realizarán un trabajo de comunicación en un sentido muy amplio, lo que incluirá las redes sociales, la creación de una nueva página web y el ordenar la estética de la editorial, lo que implicará también una profesionalización, inversión de dinero y capacitación de equipo. Por otro lado, se encargarán de la renovación de su catálogo y del lanzamiento de nuevas colecciones.
A pesar de que la oficina física de Carlos Díaz se encuentra en Argentina y muchas de las decisiones importantes de la editorial se toman desde allá. El director general asegura que México sigue siendo la casa matriz de Siglo XXI. Dice siempre estar presente a través de viajes y reuniones virtuales con el equipo mexicano.
“Creo que volvemos al origen, porque no hay que olvidar que esta editorial siempre ha sido muy Argen-Mex, como lo dice Carlos, y es cierto, nuestro origen es un grandísimo editor argentino, Arnaldo Orfila, que fue de los pocos a los que Daniel Cosío Villegas le confía el Fondo de Cultura Económica (FCE) y luego pues arma Siglo 21, así que la verdad es volver al origen”, comparte Paola Morán Leyva, directora editorial de México.
Morán considera que lo interesante es ahora tener el pie en España, esta posibilidad de que sus autores latinoamericanos lleguen a Europa, donde siempre es mucho más difícil entrar.
Un tesoro para cuidar
Gracias a escritores como Octavio Paz, Fernando Benítez, Elena Poniatowska, Carlos Fuentes, Jesús Silva Herzog, Pablo González Casanova y Guillermo Haro nació la editorial Siglo XXI. Ellos ayudaron a Arnaldo Orfila Reynal a fundarla después de que el expresidente Gustavo Díaz Ordaz lo despidiera del FCE por publicar Los Hijos de Sánchez, de Oscar Lewis, texto en el que se ponía de manifiesto la situación precaria por la que pasaba México.
El camino de Siglo XXI no ha sido fácil ni en México ni en las filiales. La colombiana tuvo que cerrar en 1990, mientras que la argentina también se enfrentó al poder y Carlos Díaz lo vivió muy cerca.
Cuando tenía dos años, los militares secuestraron a su papá en plena dictadura en las instalaciones de la editorial y se llevaron a dos personas más. Cuando lo soltaron, después de dos meses, Orfila decidió cerrar Siglo XXI Argentina y le ofreció hacerse cargo de la filial en Colombia; entonces, toda su familia se mudó. Al no conocer a nadie, pasó innumerables mañanas ahí, con su papá en la editorial.
“Imagínate el cariño que le tengo a esta editorial, el agradecimiento. Mi familia trabajó en Siglo XXI, hizo grande Siglo XXI, muchos de los editores que formaron parte de Siglo XXI son mi familia.
“Hay algo ahí que me pasa con Siglo XXI, que tengo muy claro que hay un valor, que hay un tesoro ahí que tenemos que resguardar, que no nos pertenece a nosotros, que es una construcción colectiva que muchísima gente colaboró con esta editorial y no son palabras huecas”
“Paola y yo somos muy conscientes de los cientos y cientos y cientos, o tal vez, hasta miles de personas que colaboraron con Siglo XXI en distintas instancias, desde traductores o pequeños accionistas, hay un montón de gente que se involucró para construir esta editorial”, comparte el director general.
Tanto Diaz como Morán son conscientes de que están administrando una construcción colectiva, que ahora están ellos aquí, pero que en un futuro le pasarán la estafeta a una nueva generación para que siga desarrollando esta editorial.
Paola Morán expresa que ser parte de este equipo lo vive con una “gran nostalgia creativa” por toda la historia que hay detrás y las grandes personalidades que han sido parte de esta editorial.
“Para mí es cuidar y, bueno, llegar a cumplir un sueño y que ese mismo sueño no sea tapado o acabado por la realidad, sino justamente crecerlo, cuidarlo y para ello yo sí que he buscado a gente como Margo Glantz o Elena Poniatowska que esta mañana me mandó un correo que me llena de gusto, porque yo le había pedido una cita, hoy me la da y además me dice ‘tenga en cuenta que sí la leo y que de verdad me da mucho gusto lo que me dice y que quiero hablar de Siglo, porque me gusta, porque lo quiero’; entonces, claro, desde el amor creo que se puede construir mucho aunque parezca cursi”, señala Morán.
Finalmente, el equipo trabajará para que sus autores, que son intelectuales brillantes, produzcan también libros que puedan llegar a un público más amplio sin perder el rigor y así continuar con la misión de promover el pensamiento crítico.
“Siglo XXI siempre ha sido una editorial progresista o de izquierda, como quieras llamarlo, siempre fue muy moderna y siempre le preocupó el diseño gráfico, la buena comunicación, la buena prensa y siempre vendió muchos libros; entonces, no quiero que perdamos esa relación, digamos, yo no quiero que nos conformemos con ser una editorial académica, quiero que cada tanto tengamos también libros que puedan interpelar a un público más amplio”, enfatiza Carlos Díaz.
Sus novedades
Paola Morán quiere hacer los mejores libros para contarle a los jóvenes qué mundo estamos viviendo. Estas serán sus novedades de este año:
- El elogio de la impureza. Promiscuidad e historia en Norteamérica, de Mauricio Tenorio
- El poder de los afectos en la política, de Chantal Mouffe
- Claves para desentrañar el feminismo, de Marcela Lagarde
- Las neuronas de Dios, de Diego Golombek
