Para evitar padecer enfermedades como sobrepeso, se debe llevar una dieta estilo “vikingo”, que consta de granos enteros, verduras, tubérculos, frutas, productos lácteos bajos en grasa y tres porciones de pescado por semana, de acuerdo al Instituto de Salud Pública y Nutrición Clínica de la Universidad del Este de Finlandia.
En la investigación publicada en American Journal of Clinical Nutrition se establece que los alimentos mencionados forman parte de la llamada “Nueva Dieta Nórdica” que, como su nombre lo dice, es originaria de la región nórdica de Dinamarca, Finlandia, Islandia, Noruega y Suecia.
Esta dieta contribuye a la reducción de peso y presión arterial en personas obesas. Y surgió a raíz de un simposio organizado en 2004 por los chefs daneses René Redzepi y Claus Meyer.
Esta dieta está cobrando auge como movimiento culinario gracias a los principios en los que se rige: “(…) una combinación de buen sabor, sostenibilidad e ingredientes locales”, señala Meyer en su sitio Web. De hecho, sus creadores argumentan que “no es una ‘dieta’ en el sentido convencional (…)”.
Redzepi prefiere que este tipo de cocina se describa como “cocina auténtica” y no como “dieta”, reportó The New York Times en 2011.
Según Quartz, la dieta nórdica no es del todo diferente de la dieta mediterránea, pues ambas promueven el consumo moderado de grasas, proteína y alimentos antioxidantes.
“Lo que el aceite de oliva, las nueces, los frijoles y las sardinas es para el Mediterráneo, el aceite de canola, las bayas, las hortalizas de raíz y el bacalao son a Escandinavia”.
La dieta nórdica está principalmente basada en plantas. Y predominan los alimentos de mar como las algas, el pescado, los mariscos y caracoles. También se promueve el consumo de carne de pastoreo o de animales salvajes.