Si eres de los millones de fanáticos de “How I met your mother” que no soportaban a Ted Mosby, el protagonista, ahora tienes una razón más para que te desagrade.
Y es que series como esta tienen un efecto secundario: nos vuelven más cínicos en lo que al amor concierne.
Una investigación reciente, que se publicará en el próximo número de Psychology of Popular Media Culture, reveló que las personas que suelen ver series con tramas secundarias románticas, como “Friends”, “The big bang theory” o “Mad men”, no son tan propensas a creer en el amor eterno y el romance.
El estudio, realizado por investigadores de la Universidad de Michigan, preguntó a los participantes qué tan regularmente veían tres diferentes tipos de contenido: comedias románticas, reality shows cuya finalidad es el matrimonio y series.
El resto de las preguntas giraban alrededor de sus creencias respecto al amor, con afirmaciones del estilo de “Cuando conoces a la persona correcta, lo sabes inmediatamente” y “Mi verdadero amor será perfecto”.
¿El resultado? Las personas que creían con más intensidad en el amor idealista y romántico fueron las que se exponían más a las comedias románticas y los reality shows, mientras que los más cínicos fueron los que veían series televisivas.
Y mientras más series veían, más débil era su creencia del amor ideal.
De acuerdo con los expertos, esto se debe a que los mensajes en ambos tipos de historias son distintos. En las películas, solo se tiene un par de horas para contar toda la historia de amor, así que se eligen exclusivamente las partes felices… y el final también lo es.
En cambio, en las series, se relata la odisea de los protagonistas en la búsqueda del amor, y en ocasiones falla cuando creen haberlo encontrado. Y como en el caso de la popular serie que finalizó este año, “How I met your mother”, a veces el final decepciona a los fanáticos.
