La Casa del Dragón llega a su fin: temporada 2 deja un guiño a ‘Game of Thrones’

En este final de la segunda temporada, los bandos de Rhaenyra y Aegon tomaron, finalmente, sus posiciones para la batalla
Carlos Ramírez Carlos Ramírez Publicado el
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La Casa del Dragón llegó a su fin y, como es costumbre, dejó a todos los espectadores al filo del asiento y con entusiasmo por profundizar en la saga creada por George R.R. Martin.

En este final de la segunda temporada, los bandos de Rhaenyra y Aegon tomaron, finalmente, sus posiciones para la batalla y “los dragones bailan”.

¿Qué pasó en el último capítulo de La Casa del Dragón 2?

Al comienzo del episodio, Tyland Lannister busca nuevas alianzas para la flota bajo el Consejo Verde. Las demandas de los líderes de Essos, el continente más grande del mapa, incluyen ceder el control sobre las disputadas islas conocidas como los Stepstones.

Sin embargo, el mayor desafío para Tyland surge con la aparición de Sharako Lohar, una comandante reconocida por dirigir las tropas marítimas de la región.

Para asegurar el trato, Tyland debe ganar su respeto y vencerla en un enfrentamiento.

Paralelamente, Aemond continúa embriagado de poder, conquistando nuevas ciudades con su ejército.

Mientras tanto, Aegon II se recupera de las heridas que casi terminan con su vida. Aunque desea regresar al trono, Lord Larys insiste en que la mejor opción es escapar del ejército de dragones de Rhaenyra.

En Dragonstone, Ulf el Blanco, Hugh Hammer y Addam di Hull continúan adaptándose a la vida de jinetes bajo el mando del Consejo Negro de Rhaenyra. A pesar del descontento de Jacaerys, los seis dragones que ahora tienen de su lado apuntan a la victoria.

Esto alarma al Desembarco del Rey y obliga a Aemond a cerrar las fronteras para evitar que más personas se unan a la oposición, un acto que resultará en cientos de habitantes perdiendo su sustento debido a la limitación de actividades como la pesca. Este detalle, aunque aparentemente insignificante, resalta la naturaleza cruel de Aemond y su falta de empatía hacia su pueblo.

En Harrenhal, Alfred Broome, miembro del Consejo Negro, visita a Daemon para convencerlo de tomar el lugar de Rhaenyra y convertirse en el rey que, según él, necesitan. Simon Strong escucha esta conversación y decide advertir a la reina sobre una posible traición en desarrollo. Por otro lado, Alicent y Helaena Targaryen confiesan su cansancio por el peso de la nobleza. En una conversación resonante con la idea de escapar y dejarlo todo atrás, Alicent pide ayuda a su confidente Orwyle para trasladarse a otro lugar.

Para Criston Cole, la esperanza es cada vez menor. En una confesión con Gwayne Hightower, quien muestra su molestia por la relación de Cole con su hermana Alicent, habla sobre cómo ya no tiene miedo a morir y que lo que siente por la reina es real.

Este momento de catarsis es interrumpido por una secuencia que nos transporta a tierras lejanas para ser testigos del enfrentamiento entre Tyland y Lohar.

Los dos se baten en un charco de lodo, y después de un combate físico en el que Tyland demuestra su valentía, la comandante promete considerar la propuesta de aliarse con “los Verdes”, una unión que se consuma durante una cena de celebración, donde promete vengarse de Corlys Velaryon.

¿Qué pasa en el final de temporada?

En el último episodio de esta temporada, Rhaenyra regresa a su castillo para encontrarse con una visita inesperada: Alicent Hightower.

Con cautela, ambas reinas se enfrentan, y al preguntarle a Alicent el propósito de su visita, esta le confiesa que admite haber estado equivocada al no dar tregua a “los Negros” y que solo actuaba según lo que creía correcto.

No obstante, ahora está dispuesta a enmendar sus errores, proponiendo abrir las puertas de su reino cuando Aemond no se encuentre, para que Rhaenyra pueda entrar y reclamar el trono pacíficamente, evitando así la guerra. Sorprendida por la oferta, Rhaenyra responde que la única forma en la que eso podría funcionar es si se le permite asesinar a Aegon II y mostrar su cabeza ante todos.

En un momento de alta tensión, Alicent accede a los términos que sellarían el destino de su propio hijo.

El rugido de los dragones marca el final del capítulo y el escenario queda establecido de la siguiente manera: las tropas marítimas están a punto de enfrentarse; Aegon II ha decidido escapar junto a Larys Strong; Rhaena Targaryen, hija de Daemon, encuentra a un dragón sin jinete que podría ser la criatura que tanto ha estado esperando; Daemon está listo para enfrentarse a las tropas de los Verdes en Riverlands; mientras que Rhaenyra y Alicent deberán sacrificar mucho para cumplir sus objetivos.

Esta temporada de House of the Dragon ha sido una transición hacia la guerra que acabará con los Targaryen.

Guiño a GOT

En el último capítulo, su arco se cierra al tocar un árbol arciano de los antiguos dioses, donde Alys Rivers le muestra uno de los guiños más directos a Game of Thrones, un detalle que encantará a los fanáticos de la serie original.

En esta visión final, Daemon observa al Rey Nocturno acercándose a los siete reinos. Luego, unas botas que coinciden con las de Jon Snow revelan al guerrero luchando contra los caminantes nocturnos.

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