“Independiente”: Una mirada teatral a la política y el poder en la CDMX

En el bullicioso escenario de la Ciudad de México, donde el fervor político se mezcla con el ritmo vertiginoso de la vida urbana, un joven equipo de campaña celebra un hito sin precedentes: el éxito de su candidato independiente, Sandro Bustos, en su búsqueda por convertirse en el próximo jefe de gobierno.

Las encuestas más recientes auguran un sólido tercer lugar para esta candidatura “juvenil e independiente”, desafiando las expectativas y marcando un punto de inflexión en el panorama político de la capital del país. Sin embargo, lo que parecía ser una jornada de triunfo pronto se ve empañado por una serie de inesperados acontecimientos que están a punto de cambiar el rumbo de la elección y la vida de quienes participan en ella.

Independiente, una obra teatral con tintes de comedia, la cual sumerge en el intrincado juego de poder detrás de esta elección ficticia. A través de la historia de Sandro Bustos, interpretado por Cristian Magaloni.

“Con esta obra queremos acentuar el poco control que los individuos tienen sobre sí mismos, siendo parte de un sistema opresor y patriarcal que tiene arraigadas formas añejas que prioriza la ganancia individual por encima del bienestar colectivo. Un sistema en el que nada es lo que parece y que quien cree tener el control y el poder, en realidad es manipulado y utilizado por los subsistemas que están por encima”, precisa Rina Rajlevsky, directora de esta puesta.

La directora busca que la gente reflexione sobre el control -o la falta de él- que los individuos tienen sobre sus propias vidas, en un sistema político dominado por viejas estructuras de poder y una lucha constante por el control y la influencia.

La lucha del poder

Por otro lado, Alberto Lujambio, autor de la pieza opina que Independiente mostrará el complejo mundo de la política partidista; además de explorar temas como la traición, la lucha generacional por el poder y el eterno conflicto entre el idealismo y el pragmatismo.

“Se aproxima a la política partidista como un sistema de traiciones e inercias. También la aborda como una lucha generacional por el poder, la influencia y los reflectores. Una elección a la jefatura de gobierno de la Ciudad de México sirve como pretexto para presentar el conflicto entre lo posible y lo inevitable; entre el idealismo y el pragmatismo.

“Subyace también una suerte de pesimismo mezclado con urgencia, una sensación de que el mundo se despedaza mientras los responsables de la catástrofe se reparten, por igual, las culpas y los dividendos. Estoy convencido de que la política importa porque, a pesar de ser un arreglo imperfecto, se ocupa de la vida en común. Para bien o para mal, es la arena de las luchas populares y el espejo del cambio social”, declara Alberto Lujambio.

Independiente es mucho más que una simple comedia; es una historia sin héroes ni villanos, que desafía nuestras percepciones sobre la política y la naturaleza humana. La obra promete ser una experiencia teatral única que dejará una marca indeleble en todos aquellos que tengan la oportunidad de presenciarla.