Ignacio López Tarso vio, a lo largo de su vida, el cambio de un país; la evolución y desarrollo tanto del cine mexicano, así cómo de la televisión. Forjó, con su talento sobre las tablas, el teatro, escenario del cual no se bajó sino hasta el último día de su vida, pues así como expresaba constantemente en entrevistas, él quería llegar a sus 100 años trabajando.
“Quiero llegar a 100 así como estoy, de mente y de cuerpo, que puedo valerme por mí mismo, que puedo subir y bajar, que puedo ir y volver a donde yo quiera y que no necesito la presencia de nadie para ayudarme a nada”, comentaba.
López Tarso estudió arte dramático en la Escuela de Arte Teatral del Instituto Nacional de Bellas Artes, e inició su carrera de actor en la Compañía de Teatro Estudiantil Autónomo.
@ANDIMexico comunica el sensible fallecimiento del socio intérprete Ignacio López Tarso.
Actor con una amplísima carrera en teatro, cine, televisión y política. Fue presidente de nuestra asociación.
A sus familiares y amigos les mandamos nuestras más sentidas condolencias. pic.twitter.com/bn7Kcv2H4m
— ANDIMEXICO (@ANDIMexico) March 12, 2023
Posteriormente formó parte de la compañía de Teatro Clásico de México, con la que interpretó un repertorio de obras escénicas españolas, como La Celestina, de Fernando de Rojas y Las mocedades del Cid de Guillén de Castro.
Con el papel protagónico en la obra Moctezuma II, de Sergio Magaña, el histrión alcanzó el reconocimiento profesional. A partir de ese momento hizo mancuerna con los dramaturgos Emilio Carballido, Luisa Josefina Hernández y Sergio Magaña, y en los montajes del director teatral, de origen japonés, Seki Sano.
Conocido por ser discípulo de Stanislavski, Seki Sano introdujo en México el método de formación y dirección de actores de su maestro, lo que propició el desarrollo del realismo. Estos artistas formaron un grupo que lideraría la renovación del teatro mexicano en los años cincuenta.
Voz, memoria, porte, presencia escénica al hablar y andar, López Tarso irradiaba una fuerza descomunal en trabajos que prosiguieron, como las obras Las brujas de Salem (1953), de Arthur Miller, y Prueba de fuego.
Otras piezas en las que demostró su solvencia como actor fueron El precio (también de Arthur Miller), Enrique IV (1922), de Luigi Pirandello, y El rey se muere (1962), de Eugène Ionesco.
En cuanto a su repertorio cinematográfico, López Tarso desempeñó una labor importante, participando en cintas como: Nazarín (1958), de Luis Buñuel; Juana Gallo (1960), de Miguel Zacarías, y Tarahumara (1964), de Luis Alcoriza. Con el director Roberto Gavaldón rodó parte de su repertorio más destacado como Macario (1960), El gallo de oro (1964) y La vida inútil de Pito Pérez (1970).
Su bagaje actoral también le permitió trabajar en la pantalla chica durante los años 70 y 80, época en la que participó en varias series históricas como El derecho de nacer (1981) o Senda de Gloria (1987), ambientadas en la Revolución Mexicana.
A sus 97 años se le recuerda como una leyenda andante de la actuación, enciclopedia de muchos tópicos, maestría, dedicación y profesionalismo que transmitió a lo largo de su vida, en cerca de 70 años de trayectoria artística.
“Me ha costado”, expresó en una entrevista, “de todos modos la vida es hermosa y me faltan cuatro para llegar a 100.
¿Sabías qué?
La carrera de Ignacio López Tarso incluye más de 1000 programas unitarios, series y telenovelas.
En poco más de nueve décadas de vida, Ignacio López Tarso, cuenta con más de 100 obras de teatro, 50 películas y diversas participaciones televisivas, entre telenovelas y series
Premio de López Tarso
El actor recibió a lo largo de su carrera diversas condecoraciones, destacan:
Ganador, dos veces del Premio Golden Gate al mejor actor; la primera por su trabajo en El hombre de papel (1963), de Ismael Rodríguez, y por Macario (1960), de Roberto Gavaldón.
Golden Gate Award (Festival Internacional de Cine de San Francisco, Estados Unidos, 1960) al Mejor Actor, por la cinta Macario.
Ariel a Mejor Actuación por la cinta Rosa Blanca (1973).
Doctorado Honoris Causa de la Universidad de Guadalajara, 2013.
Premio Nacional de Ciencias y Artes en la categoría de Bellas Artes, el 16 de diciembre de 2015.
Doctorado Honoris Causa en Artes y Humanidades por la Universidad de Ixtlahuaca (CUI), en el Estado de México, 2022.
López Tarso trabajó junto a grandes personalidades del cine mexicano como Dolores del Río, Marga López, Elsa Aguirre, Luis Aguilar, Katy Jurado, Pedro Armendáriz, María Félix, Emilio “El Indio” Fernández, Carlos López Moctezuma, entre otros.
