Hijo de Taylor Hawkins rinde homenaje a su padre tocando la batería con Foo Fighters

Shane Hawkins, el hijo de Taylor Hawkins, subió al escenario para tocar la batería junto con Foo Fighters durante el tributo
Indigo Staff Indigo Staff Publicado el
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El concierto en tributo a Taylor Hawkins fue sin duda uno de los eventos más emotivos que se han hecho, pues incluso, para honrar la vida del músico, su hijo, Shane Hawkins tocó la batería junto con Foo Fighters.

Así, el menor de 16 años se unió a la lista de diferentes músicos que se dieron cita para celebrar y recordar al baterista, quien falleció de manera inesperada el pasado 25 de marzo, poco antes de su presentación en Bogotá, Colombia.

Entre los que se encuentran Elton John, Billie Eilish, Paul McCartney, Brian May, Lars Ulrich, Brian Johnson, Slash, Geddy Lee, y Alex Lifeson, Roger Taylor, Brian May y por supuesto, su amigo y compañero de banda Dave Grohl.

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Este último dedicó unas palabras antes de comenzar: “Damas y caballeros, esta noche nos reunimos aquí para celebrar la vida y el amor de nuestro amigo, nuestro compañero de banda, nuestro hermano, Taylor Hawkins”, señaló.

Hijo de Taylor Hawkins lo homenajea

El momento más emotivo de la noche llegó con la participación de Shane Hawkins, el hijo del baterista, ya que no estaba anunciado en el cartel, por lo que su participación fue una grata y conmovedora sorpresa.

“Tenemos un baterista más que vendrá y tocará con nosotros esta noche. No creo que hayan visto a nadie tocar la batería como él”, comentó Dave Grohl para presentar a Shane.

“Es un miembro de nuestra familia, es muy especial que esté esta noche con todos nosotros. Damas y caballeros, con ustedes Shane Hawkins”, agregó y el hijo de Taylor subió al escenario para tomar el lugar que fuera de su padre: la batería.

Una vez listo, Foo Fighters comenzó a interpretar el tema “My Hero”, en el que Shane demostró que heredó el talento, de uno de los más carismáticos y virtuosos bateristas; además de rendir tributo.

Así, finalizó la melodía con un solo de batería mientras los asistentes al concierto llenaron el estadio de Wembley, en Londres, con aplausos y gritos para el hijo de Hawkins, quien al terminar bajó del escenario.

El tributo acabó con una emotiva interpretación de Everlong, tal como sucede con todos los conciertos de Foo Fighters; sin embargo, en esta ocasión solo cantó Dave Grohl, para poner fin al concierto que duró más de 6 horas.

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