¿Qué hace ahí? Usuarios de Google Maps encuentran una misteriosa puerta en la Antártida
El hallazgo de esta formación desató toda clase de ideas y teorías en redes sociales; esto es lo que sabemos
José Andrés VelázquezUn misterio se desató en Internet luego de que usuarios encontraron una intrigante puerta en medio de la Antártida a través de Google Maps. Luego de que se viralizó este hallazgo se desataron toda clase de teorías en las redes sociales.
Cabe recordar que Google Maps no es sólo una herramienta que nos permite ubicarnos y ofrecernos rutas para llegar a nuestros destinos. También es usada por muchas personas como una alternativa de exploración digital con las que pueden visitar virtualmente lugares de todo el mundo.
En diversas ocasiones las personas que usan Google Maps para la exploración virtual han encontrado varias curiosidades. A veces van desde mascotas hasta gente que se tropezó y cuya caída fue capturada por las cámaras de la herramienta.
¿Qué hace una puerta en la Antártida?
En este contexto, el descubrimiento de esta misteriosa puerta que parece estar en medio de la nada despertó la curiosidad de más de una persona. Además, como es común, desató toda clase de ideas y teorías.
La puerta de la Antártida fue encontrada al sureste de la estación Showa, una base de investigación permanente que es operada por Japón. Las coordenadas exactas de este descubrimiento son: 69°00’50″S 39°36’22″E. A continuación puedes encontrar el mapa para verlo por tu propia cuenta.
El descubrimiento se compartió por un usuario de Reddit, cuya publicación atrajo toda clase de reacciones. Había quienes aseguraban que era la entrada de una base secreta, otros que dijeron que era una especie de portal a otra dimensión, mientras que algunos más bromearon con la idea de que era la casa de vacaciones de Pie Grande.
Sin embargo, todo esto fue desmentido por científicos, quienes luego de revisar las coordenadas, determinaron que se trata en realidad de un iceberg que quedó varado y simplemente se derrite en el lugar.
Aseguraron que en realidad se trata de un fenómeno completamente natural, por lo que no hay motivo para alarmarse.