Mujer enamorada, fuerte y orgullosa de sus raíces. A través de su pintura, sus letras, ideales y estética, Frida Kahlo es considerada un símbolo mexicano. Su arte ha sido admirado internacionalmente y se convirtió en un referente de la cultura mexicana. Sin embargo, su relación con Diego ha sido uno de los puntos más llamativos de su vida y es quizá el motivo por el que se convirtió en todo un fenómeno de masas.
Frida supo plasmar de una manera bella y simbólica el dolor que le causó el fatal accidente que sufrió a los 18 años que le provocó numerosas fracturas y unas 32 operaciones posteriores. Estar en cama tanto tiempo, hizo que Frida se interesara en la pintura y fue desde entonces que se volvió una parte central de su vida.
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No sólo se ha reconocido su arte sino su personalidad: su fuerza y rebeldía le ha ganado también ser considerada como símbolo feminista. Frida rompió estereotipos de género; era abiertamente bisexual (su amor romántico por Chavela Vargas nunca fue secreto) y desafió los estándares de lo femenino. No fue casualidad que nunca depilara sus abundantes cejas, ni el oscuro bigote que le enmarcaba la boca.
Otro importante aspecto de su vida fue su amor por Diego Rivera. Su relación con uno de los muralistas más reconocidos de México fue tormentosa desde el inicio, ya que él mantenía relaciones íntimas con varias mujeres. Después de años de intentar mantener una relación tradicional, la pareja optó por que fuera abierta para seguir sus ideales liberales, así ambos podrían involucrarse con otras personas pero seguir juntos.
Muchos argumentan que este amor “entre un elefante y una paloma” sirvió para que el trabajo de Frida tuviera el gran éxito que consiguió y que en realidad sus cuadros no tienen gran calidad.
De acuerdo a sus cartas, a pesar de sus numerosos amoríos, Frida sufría soledad y anhelaba estar con Diego. En ellas declara su interminable amor por el muralista con frases como “Te amo más que a mi propia piel”, “Si yo pudiera darte una cosa en la vida, me gustaría darte la capacidad de verte a ti mismo a través de mis ojos. Sólo entonces te darás cuenta de lo especial que eres para mí” y “Vivo cada día con la esperanza de verte regresar… y cada noche sabiendo que no estás”.
A pesar del concepto de mujer liberal e independiente en que se tiene a Frida, es innegable este factor de dependencia con Diego que la pintora representó en todo su arte. ¿Será que el que Frida lo amara sobre todas las cosas es lo que permitió que se convirtiera en una de las artistas más aceptadas en México?
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Frida era de una familia acomodada, era educada, inteligente y talentosa, sin embargo, desde que se enamoró de Diego estuvo a su merced. Incluso, luego de que Rivera le fuera infiel a Frida con su hermana Cristina, la pintora escribió:
“Lo único que te pido es que no me engañes en nada, ya no hay razón, escríbeme cada vez que puedas, procura no trabajar demasiado ahora que comiences el fresco, cuídate muchísimo tus ojitos, no vivas solito para que haya alguien que te cuide, y hagas lo que hagas, pase lo que pase, siempre te adorará tu Frida”.
Quizá Frida Kahlo fue feminista justo en la cantidad suficiente para ser rebelde pero no incomodar por ello. Finalmente representa a la tradicional mujer mexicana fuerte, luchona y capaz que sobre todas las cosas ama a su hombre. Frida pasó a la historia como eso, una mujer de talento que sufrió. Ella misma postulaba: “Tenemos que ser honestas, nosotras las mujeres no podemos vivir sin dolor”.