Franka Potente aún recuerda cuando se tiñó el cabello de un intenso rojo para interpretar a la protagonista de Corre, Lola, Corre. Nunca imaginó que ese simple cambio estético se convertiría en un símbolo tan icónico y poderoso para la película.
Era 1998 cuando una joven actriz alemana, junto al director Tom Tykwer, revolucionaba la escena del cine independiente europeo con una película de ritmo vertiginoso, narrativa no lineal y una estética completamente innovadora. Ahora, 25 años después, Corre, Lola, Corre, sigue cautivando y esta vez lo hizo en el marco del Festival de Cine Alemán, que celebró su edición número 23 con la proyección en 4K de esta icónica cinta.
La inauguración del festival, antes conocido como la Semana de Cine Alemán, se llevó a cabo el 24 de septiembre en el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris, y fue Franka Potente quien acaparó toda la atención al ser la invitada especial de este encuentro fílmico que se realizará del 25 de septiembre al 6 de octubre en varias sedes de la Ciudad de México.
“Es increíble estar aquí, especialmente en un lugar como México, donde el cine alemán ha sido tan bien recibido. Lola siempre será una parte muy importante de mí. Me lanzó a la fama, pero el personaje representa algo mucho más profundo. Creo que, de alguna manera, todos tenemos un poco de Lola, esa necesidad de correr contra el tiempo, de enfrentar el caos de la vida”, expresó la actriz.
“Corre, Lola, Corre” y su impacto en la actualidad
El largometraje, que se convirtió en un referente del cine alemán contemporáneo, narra tres versiones de una misma historia, donde Lola y su inagotable energía, tiene 20 minutos para salvar a su novio de una situación desesperada. La narrativa del filme, junto a su estilo visual y una banda sonora que todavía resuena entre los seguidores del techno de los noventa, conquistó al público internacional y catapultó a Tykwer y Potente al estrellato.
“Cuando comenzamos a filmar, nunca imaginamos el impacto que tendría. Era una película que hicimos con mucho corazón, pero era pequeña, modesta. De repente, explotó de una manera que nadie esperaba. Lola no solo corría en la pantalla, sino que parecía correr por todo el mundo, conectando con diferentes generaciones y culturas”, recordó Potente.
Para la también cantante, la cinta sigue siendo un hito no solo por el éxito que representó, sino porque le permitió trabajar en proyectos tanto en Alemania como en Hollywood: “sin duda, cambió mi vida. Fue un punto de inflexión, y lo sigue siendo, porque me sigue trayendo a lugares como este, donde el cariño del público es palpable”.
Durante la función especial, el público mexicano pudo disfrutar de una versión restaurada en 4K de Corre, Lola, Corre, lo que permitió redescubrir los detalles que hicieron de esta película un clásico instantáneo. Los colores vibrantes, los cortes rápidos y esa energía frenética que caracterizan a la cinta lucieron como nunca.
“Es increíble ver cómo la tecnología ha avanzado. Ahora podemos apreciar todos esos pequeños detalles que, en su momento, tal vez no se veían tan nítidos. Me parece maravilloso que una nueva generación pueda experimentar la película de esta forma.
“Lo más especial de esta película es que, aunque fue hecha en un contexto muy específico, su mensaje es universal. La lucha contra el tiempo, la sensación de urgencia, la búsqueda de soluciones en situaciones desesperadas… son cosas que todos enfrentamos de una forma u otra”, concluyó.
Las anécdotas
Franka Potente compartió varios recuerdos del rodaje, entre ellas cómo el ritmo agotador de las carreras por Berlín le dejó algunas lesiones. También recordó cómo se sintió abrumada al ver la respuesta del público tras el estreno de la película.
“Correr durante tantas horas no fue fácil, pero creo que ese agotamiento físico se reflejaba en el personaje, le daba una autenticidad que de otra forma no hubiera tenido. Tiempo después, la película empezó a tener una vida propia, en todos lados la gente me reconocía como Lola, y por un tiempo parecía que había perdido mi identidad, luego me di cuenta de que era un regalo, porque ella había tocado a la gente de una manera que yo nunca imaginé”, dijo.