Desde el principio hasta el final de este increíble concierto, no hubo una sola canción de System of a Down (SOAD) que no cantarán las miles de personas que se dieron cita en el campo de golf de Teotihuacán; la banda estadounidense salvó el día y la mala pasada que experimentaron varios de los asistentes por fallas en la organización del Force Fest 2018.
La exhibición que dieron la noche del sábado 6 de octubre Serj Tankian, Daron Malakian, Shavo Odadjian y John Dolmayan es la clara muestra de una banda madura, que domina a la perfección su arte y sabe lo que el público espera de ellos.
Se trató de un setlist de 32 poderosas canciones que conectaron de manera perfecta con el público mexicano, el cual abarrotó el escenario principal del festival de metal realizado a las afueras de la Ciudad de México.
Prision Song, I-E-A-I-A-I-O, B.Y.O.P, Aerials, Mr. Jack, ATWA, Psycho, Chop Suey!, Question!, Lonely Day, Cigaro, Tocity y Sugar, son solo algunos de los grandes temas con lo que System hipnotizó y conquistó al público mexicano.
Una presentación a la que técnicamente no se le puede poner un pero; quizá sólo el detalle que la banda no haya ejecutado temas clásicos que el público pedía del disco Steal This Album. Sin embargo, producciones como Toxicity, Mesmerize y Hypnotize fueron explotados en su totalidad.
El público mexicano se comportó a la altura de la situación; saltaba, levantaba las manos, gritaba y cantaba canciones completas a la par de Tankian y Malakian. Ahí quedó de manifiesto que SOAD es una banda con un increíble fandom en territorio nacional.
Las canciones de System hablan sobre denuncias políticas y sociales, abusos de poder, globalización e injusticias, temas que en México conocemos a la perfección. Es por este motivo que la banda conecta de esta manera en el país.
El tema generacional también fue clave para la presentación, SOAD acaba de cumplir 24 años de carrera. Su público se encuentra entre los 25 y los 35 años de edad; se trata de gente que contempló el crecimiento artístico de la banda durante todos estos años.
System of a Down es una de esas bandas que, por lo regular, conoces en la secundaria o en la prepa y te marca de por vida. Esto se debe a que los sentimientos de desolación que describen en su música son genuinos y sin ninguna clase prejuicio.
Mención aparte merece el espectáculo de luces que el equipo de producción preparó para la noche. Un juego de luces que pasaba de la violencia a la pasividad con los interminables cambios de ritmo, que durante años han caracterizado a la banda.
Poco le importó a la gente el lodazal generado por la intensa lluvia que cayó durante la tarde; un minuto de silencio para todo el calzado que perdió la vida a lo largo del día.
Lo de System fue simplemente la presentación de una banda perfecta con el público perfecto.
Fallas en la organización
Aunque System hizo olvida muchas de las fallas que presentó el Force Fest, no se puede ignorar la desorganización para ingresar al lugar, las eternas filas, el caos del estacionamiento, los altos precios en comida y bebida, así como las fallas de sonido en escenarios alternos.
El tema se complicó mucho más cuando al final de la jornada miles de personas se disponían a abandonar el estacionamiento, pues el lodo provocó que decenas de automóviles se quedaran atascados. De una a tres horas fue el tiempo estimado para salir del sitio.
