La flor del cempasúchil es un ícono de la cultura mexicana, especialmente durante la celebración del Día de Muertos. Durante la época prehispánica, los mexicas asociaban el característico color amarillo del cempasúchil con el Sol, y por ello lo utilizaban en altares, ofrendas y entierros dedicados a sus muertos.
Con una diversidad de 30 variedades, estas flores son conocidas también como “flor de muerto, flor de niño o cempoal”. La tradición establece que se deben hacer senderos con cempasúchil desde el camino principal hasta el altar en casa, con el fin de guiar a las almas hacia los altares. Las flores producidas en Colima son perfectas para hacer que las ofrendas y altares luzcan en todo su esplendor.
Conocida en náhuatl como “Cempohualxochitl”, que significa flor de 20 pétalos, el cempasúchil es uno de los símbolos más representativos de esta celebración. Sin embargo, pocos saben que en el estado de Colima se cultiva y cosecha esta joya nacional. La capital, así como los municipios de Cuauhtémoc y Comala, destacan por sus viveros y plantíos donde florecen miles de cempasúchiles, listas para embellecer las ofrendas en honor a los difuntos.
Colima
En la capital colimense, decenas de viveros e invernaderos producen flores en una variedad de colores, pero para quienes buscan cempasúchil, una excelente opción son los Viveros Unidos de Colima. Esta empresa se especializa en la producción y comercialización de plantas ornamentales de alta calidad, incluyendo la preciada flor que adorna los altares durante el Día de Muertos. Gracias a su dedicación en el cuidado de las plantas, se conoce como un punto de referencia para adquirir cempasúchil en maceta, desde una sola pieza hasta grandes pedidos.
Comala
Comala, conocido como “El Pueblo Blanco de América”, también se distingue por su producción de cempasúchil. En la comunidad indígena de Zacualpan, un proyecto ciudadano resplandece gracias a este ícono de la cultura mexicana. Aquí, tres viveros permiten que varios grupos de habitantes trabajen juntos para reactivar la economía local, impulsando las tradiciones mexicanas y aprovechando la fértil tierra de la región. A diferencia de otros lugares en el estado, en Comala se vende el cempasúchil en ramos, además de ofrecer la opción de adquirirlo en maceta. La flor ha encontrado un lugar en la gastronomía local, como en Suchitlán, donde se elabora un delicioso atole de cempasúchil.
Cuauhtémoc
En la comunidad de Alcaraces, en el municipio de Cuauhtémoc, se encuentra “Viveros y Plantas Gómez”, un proyecto de producción de cempasúchil que este año cosechó más de 60 mil plantas. La demanda por estas flores ha crecido significativamente año tras año. Para garantizar la calidad, las plantas se siembran en charolas y, tras un arduo proceso de cuidado, el personal asegura que alcancen su punto óptimo de floración. Este vivero ofrece tres variedades de colores: naranja, amarillo oro y amarillo bronce. La venta del cempasúchil comienza a mediados de octubre y se extiende hasta finales de mes, con precios de 20 pesos por pieza al mayoreo y 25 pesos al menudeo. “Viveros y Plantas Gómez” tiene abiertas sus puertas al público, con acceso gratuito.